Censura

El presidente de Polonia veta la polémica ley de medios

Duda da la espalda a una norma vista por la oposición como un intento de acallar a la única televisión crítica con el Gobierno ultra

El presidente Duda, que históricamente ha contado con el apoyo del PiS, dijo que apreciaba el intento del Ejecutivo de proteger al país de actores potencialmente hostiles como Rusia
El presidente Duda, que históricamente ha contado con el apoyo del PiS, dijo que apreciaba el intento del Ejecutivo de proteger al país de actores potencialmente hostiles como RusiaAndrzej LangeEFE

Polonia se enfrenta a un escenario completamente nuevo. La dupla Jarosław Kaczynski-Andrzej Duda se fracturó con la decisión del presidente de vetar la controvertida ley de propiedad de medios que, según los críticos, tenía la intención de silenciar a TVN, de propiedad estadounidense y crítica con el Gobierno.

El «Sejm» (Cámara Baja del Parlamento de Polonia) aprobó a principios de diciembre una ley de medios que pretendía limitar a los medios de comunicación de propiedad extranjera. La bautizada como «Ley TVN», ya que solo afectaba a la cadena del grupo Discovery, sacó a las calles a miles de ciudadanos desde su aprobación. De haber seguido adelante, el grupo, con sede en Estados Unidos, habría tenido que vender su participación en TVN24. La ley tenía como objetivo impedir que empresas ajenas al Espacio Económico Europeo (EEE) controlen medios de comunicación polacos.

La empresa matriz de TVN24, TVN, es propiedad de Discovery a través de una empresa con sede en Países Bajos, para eludir la prohibición actual de que empresas no europeas posean más del 49% de los medios de Polonia. Con el veto del presidente Duda, los ultraderechistas de Ley y Justicia (PiS) ven frustradas sus aspiraciones.

El PiS mantiene 228 votos en la Cámara Baja, más tres diputados de Kukiz’15, junto con Łukasz Mejza y Zbigniew Ajchler. Es probable que Kaczynski pueda persuadir a la Confederación (11 diputados); por lo que obtendría como máximo 244 votos. Insuficientes, ya que sin la oposición es imposible adoptar la ley de medios, ya que se necesitan 276 votos para romper el veto del presidente.

El Gobierno polaco mantiene desde hace años una relación hostil con TVN. La cadena de televisión, muy crítica con la acciones del PiS, ha sido uno de los medios perjudicados por leyes como la de publicidad, aprobada este año, que redujo significativamente los ingresos financieros de varios medios privados, obligando a algunos a cerrar. El Gobierno de Kaczynski ha defendido durante mucho tiempo que las corporaciones extranjeras han tenido demasiado poder sobre los medios polacos.

El presidente Duda, que históricamente ha contado con el apoyo del PiS, dijo que apreciaba el intento del Ejecutivo de proteger al país de actores potencialmente hostiles como Rusia, en alusión a una de las principales quejas del líder del PiS, que argumentó que su principal objetivo era prohibir que Vladimir Putin pudiera hacerse con un gran medio en Polonia. El movimiento del presidente polaco podría abrir la puerta a un futuro acuerdo bilateral que solo implique a Washington y Varsovia, y a la posterior aprobación de esta polémica ley.

«El proyecto de ley y sus enmiendas se refieren a entidades que ya están presentes en el mercado», dijo Duda. «También está el tema del pluralismo de los medios, de la libertad de expresión. Al tomar mi decisión, tomé este elemento muy en serio». El presidente también aludió a un acuerdo económico firmado con EE UU en los años noventa. «Si hemos llegado a un acuerdo tenemos que mantenerlo. Si no lo hacemos, los demás tampoco cumplirán. Somos un Estado con honor y cuando hacemos un acuerdo, nos adherimos a él», justificó.

Miles de ciudadanos protestaron a principios de este mes frente al palacio presidencial. Al grito de «Libertad de prensa» en las manifestaciones se ondeaban banderas de la UE y se sostenían carteles con el logotipo de TVN24. El ex presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y actual líder del partido de la oposición Plataforma Cívica, afirmó que la decisión de Duda es la demostración de que «la presión tiene sentido». Bruselas había asegurado, a través de la vicepresidenta de la Comisión Vera Jourova que la UE tomaría medidas contra cualquier ley que no cumpliera con la legislación comunitaria.