Diversificación

Reino Unido excluye a China de la construcción de una nueva central nuclear

El Gobierno británico invertirá 810 millones en una nueva planta que se construirá con el socio francés EDF

Por una política energética seria y democrática
Por una política energética seria y democráticaDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

El primer ministro británico, Rishi Sunak, dio ayer su primer discurso en política exterior. Sunak dejó claro que durante su mandato, Reino Unido será “más fuerte en la defensa de nuestros valores y la apertura de la que depende nuestra prosperidad. Significa generar una economía más fuerte en casa, porque es la base de nuestra fortaleza en el extranjero. Y significa hacer frente a nuestros competidores, no con gran retórica sino con un pragmatismo sólido”.

Ni 24 horas han pasado cuando el Gobierno de Sunak ha confirmado que expulsará a la empresa China General Nuclear Power Group (CGN) de la construcción de su nueva central nuclear Sizewell C y a partir de ahora se construirá con el socio francés, EDF.

China representa un “desafío sistémico” a los valores e intereses de Reino Unido que se agudiza “a medida que avanza hacia un autoritarismo aún mayor”, aseveró ayer Sunak.

Es más, antes de hacer el anuncio oficial, el ministerio británico de Exteriores había convocado al embajador chino en Londres, Zheng Zeguang, para expresar la protesta del Gobierno por el arresto y la agresión de un periodista de la cadena BBC mientras cubría las inéditas protestas en Shanghái.

Después, el Ejecutivo de Sunak aseveró que invertirá 700 millones de libras (unos 810 millones de euros) en un proyecto encabezado por la empresa estatal francesa EDF para construir una nueva planta nuclear cerca del pueblo pesquero de Sizewell, en el este de Inglaterra.

Según informa la agencia EFE, el apoyo del Ejecutivo de Rishi Sunak a la central “Sizewell C”, que sustituiría a una cercana ya desfasada (Sizewell B), supone un paso adelante hacia la materialización de esta infraestructura, anunciada en 2010 y retrasada en numerosas ocasiones sobre todo por problemas de financiación que aún persisten.

La entrada del Gobierno, que tendrá una participación del 50% en la fase de desarrollo, pretende paliar parcialmente la salida del grupo estatal chino China General Nuclear Power Group, que tenía un 20% en un consorcio inicial forjado en 2012 con EDF, con el 80%.

Se aspira a que la construcción de Sizewell C, que tiene un coste estimado de entre 20.000 y 30.000 millones de libras (23.200 a 35.000 millones de euros), comience antes de 2024, si el proyecto consigue finalizarse con más inversores, y dure entre nueve y doce años.

Esto dependerá de cómo avance la edificación, también ralentizada y con los costes en aumento, de la central nuclear de Hinkley Point C en Somerset (suroeste inglés), igualmente a cargo de EDF y el grupo chino, que se prevé que entre en funcionamiento en 2027.

La energía “vuelve a casa”

El ministro de Energía, Grant Shapps, ha declarado en un comunicado recogido por EFE que el apoyo a Sizewell C acerca a Reino Unido a “una mayor independencia energética y lo aleja de los riesgos que supone para el suministro depender de los volátiles mercados mundiales”.

Como parte de esta estrategia de autogeneración, Shapps ha anunciado la creación de un organismo llamado “Great British Nuclear” para desarrollar múltiples proyectos de energía nuclear, que complementarán otras medidas de diversificación energética.

El consejero delegado de EDF Energy, Simone Rossi, ha afirmado que la implicación del Gobierno “es un gran voto de confianza” en el proyecto de Sizewell C y ha celebrado que vayan a trabajar conjuntamente para atraer a más inversores que permitan llevarlo a cabo.