Reino Unido

Arranca la batalla por el liderazgo laborista

El Comité Nacional decide hoy si Corbyn necesitará recabar el apoyo de 51 diputados para batirse a la diputada Angela Eagle

La diputada laborista Angela Eagle, antes de su rueda de prensa celebrada ayer en Londres
La diputada laborista Angela Eagle, antes de su rueda de prensa celebrada ayer en Londreslarazon

El Comité Nacional decide hoy si Corbyn necesitará recabar el apoyo de 51 diputados para batirse a la diputada Angela Eagle

Mientras los conservadores británicos han acabado con su división interna tras cerrar filas alrededor de la ministra del Interior, Theresa May, la oposición laborista sigue enfangada en la crisis abierta tras el triunfo del Brexit el 23-J.

La diputada Angela Eagle, de 55 años, confirmó ayer oficialmente que disputará el liderazgo del partido a Jeremy Corbyn, que a finales de junio perdió el apoyo del 80% de los diputados laboristas en Westminster por su débil defensa de la permanencia de Reino Unido en la UE. A pesar de ello, Corbyn, que lleva casi un año al frente del partido tras la dimisión de Ed Miliband por la derrota electoral de junio, se niega a dimitir confiando en el apoyo de la militancia y de los sindicatos.

La centrista Eagle, parlamentaria por la cinscunscripción inglesa de Wallasey desde 1992, presentó ayer en Londres su candidatura al contar con el apoyo de 51 parlamentarios. «Ahora mismo, Jeremy Corbyn es incapaz de aportar el liderazgo que se necesita para esta importante tarea y yo creo que sí puedo. No estoy aquí por un Partido Laborista que participa, estoy aquí para ganar», aseguró la que fuera responsable de Negocios del «gabinete en la sombra» hasta su dimisión hace tres semanas.

«Estoy aquí para ganar. No daré un paso atrás para permitir que Reino Unido sea un Estado de un solo partido, el ‘tory’. Le debemos mucho a millones de personas en nuestro país que nos pidieron ayuda» al votar por los laboristas, subrayó Eagle tras reconocer la difícil situación que atraviesa el partido. Ahora éste debe decidir si Corbyn puede presentarse automáticamente como candidato para liderar de nuevo la formación o necesita el aval de más de 50 parlamentarios. El Comité Nacional Ejecutivo (NEC) tomará la decisión en medio de las amenazas de escisión del laborismo entre izquierdistas y centristas. Según los medios británicos, el partido se enfrenta a su mayor amenaza de ruptura desde la creación del Partido Socialdemócrata en 1981. Aquella fractura condenó a los laboristas a más de tres lustros en la oposición. La ejecutiva del partido, formada por diputados, eurodiputados, concejales y sindicatos, está dividida entre ambos bandos, lo que augura una decisión ajustada.

Durante el fin de semana, un cada día más cuestionado Corbyn reconoció a la BBC que se sentía decepcionado por el desafío de Eagle y amenazó con acudir a los tribunales si el NEC no le permite competir por el liderazgo. Ya en 1988, la ejecutiva laborista decidió que su entonces líder, Neil Kinnock, recabara las firmas necesarias para enfrentarse al diputado Tony Benn. En esa ocasión, Kinnock se impuso a su rival.

Eagle asegura que ha decidido dar un paso adelante para unir a los laboristas y convertir al partido en una auténtica alternativa de Gobierno «preparada y equipada para servir» a Reino Unido. «La verdad es que el país no cree en eso cuando nos mira ahora. Pero sí lo verán si yo gano esta lucha [interna]», sentenció la diputada. En contra de la etiqueta «blairista» que le atribuye la prensa, Eagle desmiente ser la candidata del ex primer ministro Tony Blair (1997-2007) o su sucesor, Gordon Brown (2007-2010), del que fue secretaria de Estado de Pensiones, y prefiere definirse como una «mujer laborista práctica guiada por fuertes valores». En caso de vencer, la política británica estaría en manos de dos mujeres.