Reino Unido

El Parlamento británico rechaza el adelanto electoral que pedía Johnson

El Gobierno presenta este martes una ley para convocar a las urnas que solo requiere mayoría simple y contaría con apoyo de liberales y nacionalistas escoceses

El “premier” Boris Johnson/Foto: Reuters
El “premier” Boris Johnson/Foto: Reuterslarazon

El Gobierno presenta este martes una ley para convocar a las urnas que solo requiere mayoría simple y contaría con apoyo de liberales y nacionalistas escoceses

La gran promesa de Boris Johnson siempre fue la de sacar a Reino Unido de la UE para el 31 de octubre «sin peros ni condicionales». Sin embargo, el primer ministro reconoció el lunes, por primera vez, que no podrá cumplir su palabra.

Aunque a regañadientes, al líder «tory» no le quedó más remedio que aceptar la prórroga flexible hasta el próximo 31 de enero concedida por la UE. Se trata de la tercera extensión desde que en 2016 comenzó el tortuoso proceso de divorcio. Pese a que Bruselas ha cerrado ya dos acuerdos de retirada –uno con Theresa May y otro con Johnson–el inquilino de turno de Downing Street es incapaz luego de ratificarlo en Westminster.

En una carta remitida al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, el primer ministro señaló que ya no aceptará nuevas ampliaciones de plazos. Aunque lo cierto es que su palabra ahora no cuenta especialmente con demasiada credibilidad.

En su misiva, Johnson subraya que esta prórroga le ha sido «impuesta» a su Gobierno «contra su voluntad» y que él considera que es «dañina para nuestra democracia y para la relación entre nosotros y nuestros amigos europeos». El «premier» deja claro que, aunque no tratará de «perturbar deliberadamente» el funcionamiento de la UE en los meses adicionales en que Reino Unido siga siendo miembro, seguirá protegiendo los intereses de su país, «incluidos en la toma de decisiones de la UE».

Por otra parte, Johnson indica a Tusk que le hubiera gustado que el Parlamento británico hubiera ratificado el acuerdo alcanzado hace dos semanas. «Desgraciadamente, me temo que este Parlamento nunca lo hará mientras tenga la opción de seguir demorándolo», subraya.

Por ello, añade, busca la convocatoria de elecciones generales anticipadas para lograr un «nuevo Parlamento que sea capaz de resolver la cuestión conforme con nuestras normas constitucionales». El problema es que cada vez que ha ido a la Cámara de los Comunes con esta propuesta, ha sido rechazada.

La última derrota fue precisamente este lunes. Johnson presentó una moción para convocar comicios adelantados el próximo 12 de diciembre, pero no consiguió sacarla adelante. Bajo el llamado Mandato Parlamentario Fijo, se necesita el apoyo de dos tercios de la Cámara Baja si se quiere adelantar la cita con las urnas. En este sentido, Johnson necesitaba el respaldo de 434 diputados de los 650 que forman la Cámara Baja. Sin embargo, solo obtuvo 299 votos a favor frente a 70 en contra, en una votación en la que muchos parlamentarios se abstuvieron.

Hasta ahora, el «premier» ha perdido todas las votaciones desde que se mudó en julio a Downing Street. Y la de ayer se daba por asegurada desde el primer momento, ya que el líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, afirmó que no confía en que Johnson mantenga su palabra de convocar los comicios el 12 de diciembre si su formación vota a favor de unas elecciones, dado que el jefe de Gobierno tiene la prerrogativa de fijar la fecha definitiva una vez el Parlamento haya aprobada la moción. La realidad es que los laboristas –mal posicionados, según las encuestas– se muestran completamente divididos. La mayoría de diputados está en contra de adelantar comicios sin haber resuelto antes la crisis del Brexit.

Con todo, Johnson no tira la toalla. Este martes intentará forzar de nuevo comicios el 12 de diciembre a través de un proyecto de ley para el que solo sea necesario sacarlo adelante con mayoría simple. Todo indica que en esta ocasión podría contar con el respaldo de los liberal demócratas y escoceses independentistas del SNP, que se han comprometido a no presentar enmiendas.

Aunque estas formaciones se inclinan más por la fecha del 9 de diciembre para garantizarse que los universitarios –según las encuestas los más pro UE– no estén ya de vacaciones y puedan votar. Ambos partidos son anti Brexit y ya han adelantado que harán campaña en estos comicios para poder celebrar un segundo referéndum con la opción de permanencia en la Unión Europea.

«Ha llegado el momento de que los votantes puedan pronunciarse sobre el [nuevo] acuerdo [de retirada] y reemplacen este Parlamento disfuncional por un nuevo Parlamento que pueda sacar adelante el Brexit y que el país pueda avanzar», defendió Johnson. «No voy a permitir que continúe esta parálisis. De un modo u otro debemos seguir adelante con las elecciones. Esta Cámara no puede seguir teniendo al país como rehén», dijo.