La UE enviará un millón de proyectiles a Ucrania en los próximos doce meses

Munición , munición y munición. Los ministros de Exteriores y de Defensa de los Veintisiete han aprobado este lunes un plan para enviar obuses a Ucrania, en un momento en el que los arsenales de los países europeos están bajo presión, ya que nadie esperaba una guerra tan larga y de estas características. Las capitales europeas han desbloqueado un paquete de ayuda de 2.000 millones de euros que consta de dos fases y por el que la UE suministrará a Kyiv 1 millón de proyectiles en los próximos doce meses.

En el primer estadio, los países europeos vaciarán sus arsenales de munición –ya sea esta soviética o la occidental de 155 mm- ,ya que no hay tiempo que perder. Después, se pondrá en marcha una segunda fase de compras conjuntas de armamento de 155 mm (obuses) para reponer los arsenales nacionales y que los países europeos puedan seguir auxiliando a Ucrania. El desafío es ingente, ya que el Gobierno ucraniano ha pedido a la UE hasta 250.000 obuses al mes.

Los países europeos que vacíen sus arsenales serán auxiliados con 1.000 millones de euros del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz, una herramienta de dinero común que oficialmente no pertenece al presupuesto comunitario y que es sufragado con las aportaciones de los países europeos según su PIB. Esta herramienta financiará entre el 50% y el 60% de las contribuciones de los países europeos.

La segunda fase del plan ha sido más peliaguda de aprobar. En esta caso se trata de poner en marcha un plan de adquisición de obuses a través de compras conjuntas que se puedan canalizar a través de los mecanismos previstos por parte de la Agencia Europea de Defensa o por iniciativa de varios países europeos. La propuesta elaborada por el máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, pretendía que fuera el organismo europeo el que pilotara las adquisiciones, pero las presiones de Alemania que considera que la agencia no está preparada para este cometido y no puede actuar con la suficiente celeridad en estas difíciles circunstancias han hecho que los Veintisiete hayan acabado dando luz verde a las dos vías en paralelo.

Acuerdo sin España

Este mismo lunes se ha anunciado un acuerdo de 18 países dentro de los procedimientos de la Agencia europea, al que finalmente se ha sumado Alemania ,si bien Berlín también persiste en poner en marcha coaliciones por su cuenta con otros países. España se unirá próximamente a este pacto dentro del organismo europeo, tras salvar escollos meramente técnicos

Esta segunda pata del plan de ayuda también se sufragara con otros 1.000 millones de euros del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz, aunque Bruselas tan sólo financiará la reposición de municiones que tengan por objetivo apoyar a Ucrania y no aquellas destinadas a otros fines o a mantener llenos los "stocks" nacionales.

Uno de los interrogantes es si las empresas armamentísticas europeas estarán a la altura de semejante reto. Bruselas ha identificado 15 compañías de 11 países, entre ellas las españolas Expal y Fábrica de Municiones de Granada. La Comisión Europea quiere aprovechar la ocasión para impulsar la industria armamentística europea y cree que el ritmo de fabricación puede aumentar si las empresas obtienen garantías claras de fondos. Aunque aquellas compras realizadas a través de la Agencia europea tan sólo pueden estar dirigidas a compañías europeas, los países europeos podrán recurrir a fabricación extracomunitaria en caso de necesidad.

España prefiere priorizar a las empresas europeas, aunque no se opone a otras vías. “A España le gusta trabajar en conjunto y tenemos preferencia porque las compras se hagan dentro de la industria europea, pero eso no debe ser obstáculo para alcanzar un acuerdo”, había declarado el titular español José Manuel Albares antes del comienzo del encuentro.

Se espera que los primeros pedidos puedan realizarse en el mes de mayo, aunque según el ritmo de producción actual las entregas pueden dilatarse un año y medio. Fuentes diplomáticas confían en poder acelerar los plazos gracias a este impulso.

Además, los Veintisiete también han secundado una tercera pata de este plan para promover a medio y larga plazo las compras conjuntas de todo tipo de armamento y evitar duplicidades y zancadillas entre los países europeos.