Industrias
Esta es la nueva compañía de defensa militar que nace para "defender Europa"
La firma danesa-ucraniana MITS Industries agrupa a mil expertos en drones y guerra electrónica para convertirse en el primer ‘prime’ europeo surgido de la guerra de Ucrania
Copenhague ha sido escogida como sede del nuevo holding MITS Industries, una sociedad conjunta entre el fondo ucraniano-estadounidense MITS Capital y varios fabricantes de tecnología militar de Kiev que ya suman más de mil empleados y prevén facturar más de 200 millones de dólares en 2026.
La compañía nace con vocación de integrar vehículos terrestres no tripulados, sistemas antidrones, plataformas aéreas, superficiales y submarinas, además de equipos de guerra electrónica e inteligencia de señales, todo bajo un mismo paraguas empresarial con vocación exportadora.
El presidente del grupo, Perry Boyle, subrayó que “Dinamarca aporta estabilidad financiera y acceso a la cadena logística de la OTAN, mientras Ucrania ofrece la experiencia de combate y la innovación que se genera en la línea del frente”. La alianza se formalizó tras constatar que la producción privada ucraniana ya cubre el 40 % de las necesidades del ejército local y dispone de capacidad sobrante valorada en 35 000 millones de dólares para 2025, cifra que supera holgadamente la demanda interna y convierte al país en un exportador clave para el continente.
Un modelo de negocio inspirado en Silicon Valley pero probado en el Donbás
MITS Industries operará bajo la fórmula “drone-as-a-service”, es decir, ofrecerá soluciones listas para usar a ejércitos aliados sin que estos tengan que comprar y mantener flotas propias. El sistema reduce costes logísticos y permite actualizar tecnología cada pocos meses, un ritmo que la empresa considera imprescindible ante la evolución constante de las amenazas rusas. El fondo MITS Lightning, gestionado por la misma matriz, ya ha invertido 3,7 millones de dólares en Tencore, el especialista en robots terrestres que encabeza el conglomerado, y prevé cerrar seis operaciones adicionales antes de fin de año.
La apuesta danesa se enmarca en el “modelo 2.0” de cooperación con Ucrania, un esquema presentado por el ministro de Exteriores danés, Lars Løkke Rasmussen. Según este plan, Copenhague no solo financia la producción de armamento en suelo ucraniano, sino que facilita trámites aduaneros y laborales para que empresas como MITS Industries instalen líneas de montaje en su territorio, garantizando así un “refugio seguro” frente a posibles ataques rusos y acelerando los tiempos de entrega a la OTAN.
El consejero delegado de MITS Industries, Denys Gurak, explicó que la compañía trabaja para eliminar componentes chinos de sus plataformas y sustituirlos por piezas fabricadas en Ucrania y Dinamarca, una estrategia que calificó de “crítica para blindar la cadena de suministro de la Alianza”. Además, el conglomerado contempla adquisiciones adicionales: ya negocia con fabricantes suecos de sensores térmicos y con astilleros polacos interesados en integrar drones marinos en sus corbetas, lo que ampliaría el catálogo a más de cien referencias distintas en los próximos dos años.
El objetivo final, según Gurak, es “ayudar a Ucrania a ganar la guerra actual y a Europa a prevenir la siguiente”. Con esa meta, MITS Industries planea duplicar plantilla en 2027 y alcanzar los 500 millones de dólares de ingresos anuales, cifra que le situaría a la altura de gigantes europeos como Saab o KNDS. Mientras tanto, el primer contrato ya está en marcha: suministrará 150 robots terrestres y 80 estaciones de guerra electrónica al Ministerio danés de Defensa antes de marzo de 2026, una operación valorada en 38 millones de dólares que servirá de carta de presentación ante nuevos clientes del Báltico y del norte de Europa.