Alimentación

Una experta en seguridad alimentaria pone fin a uno de los grandes mitos sobre los tuppers: "Puede ser peligroso"

Se trata de una práctica habitual para muchas personas

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Economía.- Tupperware se recupera ligeramente en Bolsa tras caer más de un 40% por posibles problemas de financiaciónEuropa Press

Cada día, millones de personas en todo el mundo confían en los tuppers para llevar su comida al trabajo, a la universidad o incluso para organizar mejor las comidas en casa. Estos recipientes, prácticos y reutilizables, se han convertido en un imprescindible en la rutina de quienes buscan ahorrar tiempo y dinero sin renunciar a una alimentación casera.

Sin embargo, a pesar de su uso extendido, muchas personas cometen siguen cometiendo errores que podrían poner en riesgo su salud sin siquiera saberlo. Desde el modo en que se almacenan hasta cómo se calientan los alimentos, existen prácticas comunes que podrían estar favoreciendo la proliferación de bacterias o la contaminación cruzada, especialmente si no se siguen ciertas recomendaciones básicas de higiene y conservación.

Ante esta situación, la experta en seguridad alimentaria Alba Ramírez (@albaramirezciencia) ha salido al paso para desmontar uno de los mitos más extendidos sobre el uso de los tuppers, una práctica que muchos consideran inofensiva, pero que podría estar comprometiendo la seguridad de los alimentos que consumimos a diario.

Evitar riesgos microbiológicos

A través de sus redes sociales, la creadora de contenido se pronuncia sobre el mito de que no se pueden guardar los tuppers recién cocinados en el frigorífico de forma inmediata, ya que eso dañaría el electrodoméstico. Así, recuerda que "lo que llevamos divulgando en seguridad alimentaria tanto tiempo es precisamente que hay que meter la comida recién cocinada en la nevera", ya que enfriar la comida lo antes posible, ayuda a "evitar riesgos microbiológicos".

Ramirez incide en que dejar la comida durante horas en la olla o fuera de la nevera -especialmente en verano cuando las temperaturas son más altas- es peligroso. En su lugar, recomienda permitir "que se atempere un poco, unos minutos o si es una olla menos de una hora" antes de meterlo en el frigorífico. De igual manera, afirma que lo más adecuado es pasarla a envases más pequeños, lo que favorece que tampoco suba en exceso la temperatura del frigorífico.

La experta en seguridad alimentaria explica que hace años se aconsejaba dejar reposar la comida "pero no era por seguridad alimentaria, era para no romper el frigorífico, pero hoy día se construyen frigorífico que tienen fuerza suficiente (...) como para que no haya ningún efecto secundario negativo". "Ni el agua que se queda es negativa, eso es propio de la cocción, no hay crecimiento microbiano negativo", concluye en la publicación.