Internacional

Johnson y Corbyn abren una bronca (pre) campaña electoral

El «premier» conservador echa en cara al líder laborista su falta de claridad con respecto al Brexit

El “premier” británico, Boris Johnson, responde a las preguntas de los diputados por última vez antes de disolverse el Parlamento
El “premier” británico, Boris Johnson, responde a las preguntas de los diputados por última vez antes de disolverse el Parlamentolarazon

El «premier» conservador echa en cara al líder laborista su falta de claridad con respecto al Brexit

La campaña electoral comenzó ayer extraoficialmente en el Reino Unido para los comicios del 12 de diciembre, una cita con importantes consecuencias también para la UE, ya que, dependiendo de quién sea el próximo primer ministro británico, Londres podrá tener una relación más o menos cercana con el bloque, o, incluso, un segundo referéndum. Se suponía que este jueves a las 24 horas los británicos debían abandonar el club. Pero acudirán de nuevo a las urnas sin que Westminster haya logrado solucionar un divorcio que se antoja eterno.

Los políticos utilizaron ayer la última sesión rutinaria de los miércoles de preguntas al primer ministro en la Cámara de los Comunes, para presentar sus respectivas propuestas. El aún premier, Boris Johnson, acusó al líder laborista, Jeremy Corbyn, de falta de claridad sobre si apoya o no el Brexit. “Liderazgo significa defender al pueblo de este país, defender a nuestra Policía, defender a nuestra Sanidad Pública, asegurar que tiene la financiación que necesita y defender nuestra economía y a los creadores del bienestar”, matizó.

Por su parte, el responsable de la oposición hizo hincapié en la crisis de la Sanidad por “la falta de médicos y de enfermeras” y por unas “excesivas listas de espera para gente enferma”. Al defender su proyecto político, centrado en las nacionalizaciones, como los ferrocarriles, Corbyn adelantó ayer desde las páginas del tabloide “Daily Mirror” que el país tiene una oportunidad “única en una generación” de transformar al Reino Unido. “Estamos poniendo en marcha la campaña más ambiciosa y radical para un verdadero cambio” en el país, agregó.

En definitiva, fue una clara declaración de intenciones. Mientras que Johnson centrará en esta campaña su mensaje en la salida del bloque, Corbyn hablará más de políticas domésticas, una estrategia que le funcionó a la perfección en las últimas elecciones de 2017 cuando, aun partiendo con 22 puntos por detrás de los tories, consiguió que acabaran perdiendo la mayoría absoluta. Y esta es la clave de estos comicios.

El grupo “Best of Britain”, que aboga por un segundo referéndum, publicó ayer un informe, según el cual, los conservadores no llegarían a la mayoría si el 30% de los electores pro-europeos vota de forma táctica en estas elecciones.

Si finalmente hubiera un parlamento sin mayorías, no se descarta que los laboristas pudieran llegar a algún tipo de pacto con liberal demócratas y escoceses del SNP para celebrar un nuevo plebiscito. Eso sí, los nacionalistas escoceses de Nicola Sturgeon ya han dejado muy claro que si alguien requiere de su apoyo la condición es celebrar una nueva consulta sobre la independencia de Escocia, como la que tuvo lugar en 2014. En este sentido, Corbyn dejó ayer la puerta abierta a este escenario si los laboristas conseguían formar Ejecutivo, aunque la consulta soberanista no sería tan pronto como quiere el SNP para 2020.