Oriente Medio

Netanyahu une a Israel en torno a la guerra contra Teherán

El 82% de los judíos israelíes apoya la operación militar del primer ministro contra su rival regional

Israel's Prime Minister Benjamin Netanyahu visits the site of the Weizmann Institute of Science, which was hit by missiles fired from Iran, in the central city of Rehovot on Friday, June 20, 2025. (Jack Guez/Pool Photo via AP)
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, visita el destruido Instituto de Ciencias WeizmannASSOCIATED PRESSAgencia AP

El 13 de junio de madrugada Israel llevó a cabo una operación largamente gestada y en el mayor de los secretos, aprobada horas antes de su ejecución por el gabinete de seguridad del primer ministro, Benjamin Netanyahu, y, según él mismo relató en una entrevista en el canal estatal Kan, casi abortada minutos antes.

Finalmente, el Ejército del Aire recibió la orden y, en una serie de oleadas, atacó instalaciones nucleares en diferentes puntos de Irán, lanzaderas de misiles y también mató, de modo casi simultáneo, a diez científicos nucleares en sus casas, en una operación que bautizaron como “León naciente”, en alusión a una cita bíblica.

La respuesta iraní no se hizo esperar con su propia operación “Promesa verdadera 3”. Desde que comenzó esta guerra, Irán ha lanzado unos 450 misiles balísticos contra diferentes puntos del país, con especial interés en Tel Aviv, sede del cuartel general del Ejército y ministerio de Defensa, Haifa, donde hay puntos sensibles como refinería y otros, pero también golpeando duramente la ciudad sureña de Beersheva, y ciudades del centro del país como Rishon Le Tzion, Ramat Gan, Holon, Bat Yam, Petaj Tikva. Hasta ahora hay 25 muertos y más de 300 de heridos. Más de 8.100 israelíes están fuera de sus casas, destruidas del todo o semi destruidas. Han sido atacados núcleos urbanos densamente poblados, edificios residenciales, escuelas, el hospital del sur Soroka, el Instituto Científico Weitzmann…

Israel e Irán son archienemigos desde que el país persa se convirtió en la República Islámica de Irán, en 1979, con su fijación particularmente hostil contra Estados Unidos e Israel, al que considera su representante en Medio Oriente y una entidad territorial a extirpar de la región.

Los dos ayatolas, líderes supremos, que han liderado Irán desde entonces, han insistido en sus planes de acabar con Israel, en Israel siempre se han tomado en serio estas amenazas y Netanyahu las ha convertido en un estribillo en sus alocuciones públicas a lo largo de su longeva vida política.

Según una encuesta del Instituto para la Democracia de Israel, el público en su mayoría apoya la decisión del gobierno de atacar preventivamente a Irán. Sin embargo, existen importantes discrepancias en la percepción de los encuestados judíos y árabes sobre este nuevo frente de guerra.

El 82% de los judíos israelíes apoya la decisión de atacar Irán y el momento en el que se ha hecho. Un 10 % más afirmó apoyar la medida, pero cree que el momento no es el adecuado, ya que se produce después de más de 600 días de combates en Gaza y con 53 rehenes aún cautivos de Hamás.

Incluso entre los judíos que se consideran de izquierda, la mayoría, un 57 %, apoya el ataque contra Irán. El 68 % de los judíos encuestados afirmó que las razones del primer ministro para lanzar el ataque fueron preocupaciones objetivas de seguridad, mientras que el 19 % afirmó que su motivación principal fueron consideraciones políticas subjetivas.

Las cifras difieren enormemente entre los árabes israelíes encuestados: solo el 11% apoyó la decisión de atacar a Irán, el 12,5% opinó que el momento no era el adecuado y el 65% se opuso rotundamente a la medida. Casi el 20% de los encuestados árabes afirmó que las consideraciones de Netanyahu para iniciar la guerra probablemente se relacionaban con la seguridad; el 68 % afirmó que eran subjetivas y políticas.

El miedo es común, pero los judíos temen menos que los árabes

La mayoría de ambos grupos afirmó estar "muy preocupada o bastante preocupada" por su seguridad personal o la de sus familias en el futuro próximo. Entre los judíos, el 66 % expresó esta preocupación; entre los encuestados árabes, la cifra ascendió al 89%.

La mayoría de los israelíes, aproximadamente dos tercios del público judío y árabe, estima que la guerra terminará en un mes, o incluso menos.

Con respecto al presidente de EEUU, Donald Trump, quien sopesa si tomar parte activa en esta guerra o no, la mayoría de los encuestados, el 58%, cree que la seguridad de Israel es una de las principales preocupaciones de Trump. Sin embargo, entre quienes se identifican como de izquierdas, esa cifra es mucho menor, de tan solo el 31%.

Según los investigadores del instituto, esta cifra ha aumentado desde mayo, en la que solo el 43% de israelíes lo creía, probablemente por la visita del presidente estadounidense al Golfo Pérsico y a sus negociaciones nucleares con Irán durante ese periodo, según los encuestadores.

Sin embargo, esta situación se invierte entre la población árabe. En mayo, el 66% de los encuestados árabes afirmó creer, en gran medida, que la seguridad de Israel es una de las principales preocupaciones de Trump. Actualmente, esa cifra se sitúa en el 43 %, porque el presidente aún no se ha unido a la guerra contra Irán.

La encuesta se realizó por internet entre el 15 y el 17 de junio, con 594 hombres y mujeres entrevistados en hebreo y 143 en árabe, que es una muestra representativa de la población adulta de Israel mayor de 18 años del país. El margen de error es de ±3,61% y el nivel de confianza 95%.