Sucesos
Caso Madeleine McCann: Los investigadores comienzan a usar el georradar mientras buscan restos en un pozo
La primera jornada de búsqueda finalizó sin grandes avances. Los investigadores creen que la niña de tres años o su pijama podrían haber sido arrojados cerca del lugar de su desaparición
El equipo de investigadores alemanes ha reanudado la búsqueda de alguna evidencia que relacione a Christian Brueckner con la desaparición de Madeleine McCann, el 3 de mayo de 2007. Brueckner cumple una condena de 7 años por la violación de una mujer estadounidense de 72 años en Praia da Luz y podría quedar en libertad el próximo mes de septiembre. Esta premura ha provocado que la fiscalía alemana de Braunschweig haya redoblado esfuerzos para tratar de completar el puzle del caso y volver a sentar en el banquillo al pedófilo alemán de 48 años. A principios de año, los responsables de la investigación, encabezados por el fiscal Hans Christian Wolters decidieron volver a entrevistar a los testigos clave. Tras las entrevistas, concluyeron que en Praia da Luz cabía la posibilidad de que pudieran encontrar los restos de Maddie o de la ropa que llevaba la niña la noche en la que fue extraída del apartamento del Oceans Club.
La zona ya había sido investigada, pero ahora se ha decidido regresar con un georradar, una herramienta que permite localizar objetos a una profundidad de 4,5 metros y que en España ya nos resulta familiar por los casos, entre otros, de los niños de Córdoba por sobre todo por el de Marta del Castillo.
El lunes, un equipo de 30 investigadores alemanes aterrizaron en el sur de Portugal y establecieron un campamento cerca de Praia da Luz, en un lugar a medio camino entre los apartamentos en los que se alojaban los McCann en mayo de 2007 y la casa en la que vivió Bureckner durante un tiempo. Si bien es cierto que el alemán condenado vivía en una autocaravana cuando desapareció la menor británica, conocía muy bien la zona, en la que hay edificios abandonados, varios pozos y zonas en las que en esa época se habían cavado una serie de zanjas cercanas a la carretera.
La primera jornada de búsqueda concluyó sin avances significativos. Se exploraron dos viviendas abandonadas, se limpiaron de malas hierbas y se realizó alguna cata en el terreno. También se exploraron dos pozos y dos tanques de agua cercanos. Según el periódico portugués "Correio da Manha", "las investigaciones se suspendieron al final del día, sin encontrar nada relevante".
Las labores de rastreo se reanudaron en la mañana de hoy, en la que entrará en funcioamiento del georradar. Las zonas pontenciales de búsqueda se centran en 21 parcelas, entre ellas, la casa de campo en la que vivió Brueckner durante varios años. Las primeras pesquisas se realizaron en una estructura cubierta de grafitis, situada a menos de 100 metros del borde de un acantilado.
De forma paralela, un grupo de bomberos continuaba bombeando agua para vaciar un pozo cercano. En el descampado donde centran las pesquisas, fuertemente custodiado por agentes de la Policía lusa para evitar la entrada de curiosos o periodistas, hay varios edificios abandonados y un par de casas. En una de ellas pasó algún tiempo el principal sospechoso de este caso, el alemán Christian Brückner, antes de la desaparición de la pequeña. La zona está siendo sobrevolada por un dron y una máquina excavadora ha sido trasladada para ayudar en las tareasde desescombro.
A pesar de que la jornada del martes terminó sin grandes hallazgos, los investigadores retiraron varias sacas de uno de los edificios para realizar análisis en el laboratorio. Y los agentes no son muy optimistas. Un oficial portugués, preguntado por los periodistas acerca de cómo iba la búsqueda comentó: "no muy bien".
Por su parte, la familia McCann sigue con atención esta nueva investigación pero no han querido hacer declaraciones. En un comunicado emitido hoy la pareja de médicos indicó que no realizará ninguna entrevista durante la investigación. Una portavoz de la campaña Find Madeleine se manifestó en el mismo sentido: “Debido a que hay una investigación policial activa, Kate y Gerry no van a dar entrevistas en este momento”.
¿Qué busca la policía?
El principal objetivo de esta nueva búsqueda -la última desde que en 2023 se montara un operativo de dos días junto al embalse de Barragem do Arade- es lograr alguna evidencia de que Madeleine estuvo en la zona. Algún juguete, restos, objetos con ADN o incluso la ropa de la pequeña británica
Una de las teorías manejadas por la policia es que la niña de tres años o su pijama podrían haber sido arrojados en zanjas cerca del complejo vacacional que se cavaron durante unas obras que se realizaron en aquel momento en la zona.