Asalto al Capitolio

Trump publica en su red social que vuelve a ser el centro de una investigación criminal

El fiscal que investiga el asalto mortal al Capitolio sopesa acusarle por los hechos que desembocaron en la muerte de cinco personas en enero de 2021

FILE - Former President Donald Trump speaks during a rally, July 7, 2023, in Council Bluffs, Iowa. (AP Photo/Charlie Riedel, File)
Trump Justice DepartmentASSOCIATED PRESSAgencia AP

A golpe de publicación en su plataforma Truth Social, como nos tiene acostumbrados, el expresidente de Estados Unidos Donald Trump ha revelado que vuelve a ser objetivo de una investigación criminal, esta vez relacionada con el ataque al Capitolio en Washington el 6 de enero de 2021 en el que fallecieron cinco personas. El exmandatario asegura que, de nuevo, ha sido el propio fiscal al frente de las pesquisas, Jack Smith, quien le habría informado a través de una carta que recibió el domingo por la noche. La misiva le llega del mismo investigador que a mediados de junio le acusó penalmente de 37 delitos relacionados con el hallazgo de documentos clasificados en su mansión de Mar-a-Lago (Florida). En menos de 4 meses, Trump va camino de recibir su tercera imputación.

El exmandatario asegura que este tipo de trámites «casi siempre significan un arresto y una acusación». El fiscal especial Jack Smith, que fue designado por el fiscal general estadounidense Merrick Garland en noviembre del 2022 para investigar a Trump, le da al magnate, según explica él mismo, «un plazo corto de cuatro días para reportarse al gran jurado». La misiva no es una acusación formal, solo informa a la persona de que una investigación está llegando a su fin y que el Departamento de Justicia está considerando acusarle. Estas notificaciones no son obligatorias y la decisión de hacerlo depende de los fiscales. Una vez informado, el investigado tiene la oportunidad de presentar pruebas que respalden su defensa y declarar ante el gran jurado. Fuentes del entorno de Trump han confirmado que posiblemente rechace la citación para comparecer ante el gran jurado.

De momento no se han revelado los cargos que enfrentaría el republicano en esta ocasión, pero podrían invocarse varias leyes. Una de ellas en la sección 373 del título 18 del Código Federal de EE UU, que apunta a que estaríamos observando un delito grave por inducir o tratar de persuadir a alguien de que incurra en el uso delictivo de la fuerza física, ya sea contra bienes o personas. El expresidente también podría ser acusado de obstrucción a un procedimiento oficial, conspirar para defraudar a su propio país o bien ayudar, asistir o incitar a la insurrección. Sea cual sea la tipificación del delito lo que está claro es que es la primera vez que los ciudadanos navegan en unas aguas tan movidas. Nunca ha habido un candidato que vaya ganando todas las encuestas de las primarias de su partido y se enfrente a por lo menos tres causas legales. Lo más interesante es que su partido cierra filas en torno a su candidato e incluso sus propios oponentes lo defienden. En un acto de campaña en West Columbia (Carolina del Sur), Ron DeSantis, gobernador de Florida y segundo favorito entre los candidatos presidenciales republicanos, aseguró que Donald Trump tendría que haber respondido con «más fuerza» ante los disturbios del 6 de enero, pero que no debería enfrentar cargos penales por su gestión y actuación el día de reyes del 2021.

Hasta ahora los encargados de investigar el asalto al Capitolio han analizado varias aristas de como Trump y sus aliados trataron de evitar la derrota en las pasadas elecciones presidenciales, y al menos dos grandes jurados han estado escuchando en los últimos meses cientos de relatos y testimonios sobre la rebelión. El propio yerno de Donald Trump, Jared Kushner, compareció ante uno de ellos. Incluso el que fuera abogado personal del expresidente, Rudolph Giuliani –que de momento no ha recibido ninguna carta que lo convierta en investigado–, fue interrogado hace poco por los fiscales al frente del caso. Además, se ha llamado a declarar a funcionarios electorales en los siete estados en los que había disputas por los votos y Trump aseguraba falsamente que le habían robado las elecciones. Según informa CNN, los abogados públicos han analizado también una «caótica reunión en el Despacho Oval» del exmandatario con su equipo en la que se llegó a discutir incluso la incautación de máquinas de votación y la invocación de la ley marcial en un intento de anular las elecciones del 2020.

Si finalmente Trump es acusado en este caso en relación con sus esfuerzos por permanecer en el poder, se enfrentaría a dos acusaciones criminales directamente relacionadas con su gestión en la Casa Blanca y su manejo de documentos clasificados. Además, el exmandatario también tiene otra causa penal pendiente en Nueva York por la que enfrenta 34 delitos criminales relacionados con la falsificación «de registros contables de Nueva York para ocultar información perjudicial y actividades ilícitas a los votantes estadounidenses antes y después de las elecciones del 2016», aseguró en un comunicado el pasado abril el fiscal de Manhattan al frente de la investigación, Alvin Bragg. De todas las causas que enfrenta el exmandatario esta es considerada la más seria porque supuso la muerte de cinco personas y el ataque a lo más valioso que tiene Estados Unidos, su democracia.