Tras más de dos horas de reunión, el histórico encuentro entre el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, y su homólogo de los Estados Unidos, Donald Trump, ha finalizado sin acuerdo pero con la esperanza de alcanzar uno en un futuro cercano que ponga fin al conflicto en Ucrania, tras más de tres años desde su inicio.

La base militar Elmendorf - Richardson de Alaska, bajo el lema "persiguiendo la paz", fue testigo de esta reunión, en la cual no había intérpretes ni traductores, entre ambas delegaciones y de la buena sintonía entre los dos mandatarios, como si de buenos vecinos se tratara. De hecho, este fue el término empleado por Putin al calificar el encuentro con Trump, destacando sus "cálidas palabras" tras varios años sin reunirse con un presidente de Estados Unidos.

Esta muestra de respeto fue correspondida por el norteamericano, asegurando Trump que "siempre ha mantenido una relación fantástica relación" con Putin a pesar de las "duras negociaciones" que ha mantenido con él.

A pesar de la buena relación, ambos dirigentes señalaron que todavía no se ha alcanzado un acuerdo concreto que ponga fin al conflicto en Ucrania, pero destacan que lo mucho que se ha avanzado en este terreno: "Hemos avanzado mucho, pero no hay acuerdo hasta que hay un acuerdo", aseguró Trump, quien añadió que tiene todavía que realizar varias llamadas, entre los que se incluyen los miembros de la OTAN y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

Asimismo, también hubo tiempo para destensar un poco más la sitiación, proponiendo Putin que la próxima reunión entre los dos dirigentes se realice en la capital rusa, Moscú, propuesta a la que Trump aseguró que "puede ver" esa posibilidad realizándose en un futuro.

Un recibimiento del más alto nivel

Antes del encuentro, Trump fue el primero en llegar a la pista de aterrizaje de las afueras de Anchorage, en Alaska, y esperó a Putin en la misma localización para recibir a su homónimo ruso a los pies del avión y en una alfombra roja, según aseguró la agencia EFE. Posteriormente, procedieron a posar escoltados por dos F-35 y flanqueados por cuatro F-22 y varios bombarderos B-2.

Allí mismo, los dos se subieron al famoso coche blindado del presidente de los Estados Unidos, "la Bestia", para dirigirse a la localización del encuentro. Asimismo, Putin aprovechó los momentos después de su reunión con Trump para visitar un cementerio donde realizará una ofrenda floral a los once militares y dos civiles soviéticos muertos entre 1942 y 1945 al intentar trasladar aviones desde EE UU hacia la Unión Soviética.

Mensaje a Europa y Zelenski

Durante la rueda de prensa posterior al encuentro entre las delegaciones rusa y norteamericana, Putin aprovechó el momento para lanzar un mensaje hacia Zelenski y los líderes europeos, siendo estos los grandes ausentes de esta cumbre: " Esperamos que desde Kyiv y las capitales europeas perciban todo esto de una manera constructiva y no construyan obstáculos, no torpedeen los progresos emergentes mediantes provocaciones o intrigas entre bastidores", advirtió.