Aranceles

La Unión Europea defiende el acuerdo con Estados Unidos: "Es mejor que una guerra comercial"

Trump y Von der Leyen pactaron aranceles al 15% el domingo tras meses de negociaciones y amenazas

El escenario no pudo ser mejor: el fastuoso salón de baile del complejo de golf de Donald Trump en Escocia sirvió de decorado para anunciar un acuerdo comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea, que ambas partes denominaron "histórico".

Después de una discusión acelerada, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el mandatario Donald Trump, fijaron los aranceles de aduana en 15% sobre los productos europeos que entren a Estados Unidos. Un cinco por ciento más que el 10% que se aplicaba hasta ahora.

La puja comenzó en 30%, la cifra con la que Trump había amenazado al bloque para el aumento de impuestos de aduana sobre medicamentos, chips electrónicos y automóviles. Finalmente, entre campos de golf y sonrisas, se redujo a la mitad.

Este lunes, el comisario de comercio de la Unión Europea, Maros Šefčovič, explicó en detalle la importancia del acuerdo con Estados Unidos, respondiendo especialmente al descontento de varios países miembros de la UE que ven en este arreglo un desequilibrio: "Estoy seguro de que esto es mejor que una guerra comercial con Estados Unidos. Este resultado es mejor que el 30% de aranceles que Washington pensaba aplicarnos y que se habría traducido en numerosas PYMES sometidas a una presión dramática, además de miles de empleos perdidos. Las empresas nos pidieron evitar una escalada".

El comisario europeo prometió estar en contacto permanente con los países que encuentran un desequilibrio en las relaciones comerciales con Estados Unidos, entre ellos Francia, Alemania, Italia, Países Bajos y la misma España. "Vamos a explicarles la complejidad del asunto: el mundo que existía antes del 2 de abril (bautizado por Trump como 'Día de la Liberación' en el que impuso aranceles al planeta entero) ha desaparecido. Tenemos que adaptarnos. Tenemos que evitar este dolor mutuo."

¿Por qué se considera desequilibrado para la Unión Europea?

Hay varios factores: el primero es la Inflation Reduction Act, promulgada por el presidente Biden en 2022, en la que Estados Unidos ofrece subvenciones y ventajas fiscales a empresas que produzcan en su territorio, especialmente en sectores como vehículos eléctricos, energía limpias, materias primas críticas como litio y cobalto, tecnología avanzada e industria local. Pero sobre todo, ofrece incentivos a empresas que se instalen en Estados Unidos y generen empleo.

Un apetitoso dulce para gigantes europeos como Volkswagen, Northvolt, Siemens y la española Iberdrola, que han multiplicado sus inversiones en territorio estadounidense. Una acción que equivale a 100.000 millones de dólares en tres años, según datos de Bloomberg. Europa también señala que Estados Unidos la supera en prestación de servicios tecnológicos, lo que afecta a la generación de empleo local.

Sin embargo, cuando se habla estrictamente de importación de bienes, Europa sale ganando. En 2024, las exportaciones de la UE a Estados Unidos aumentaron a 531.600 millones de euros, mientras que las importaciones bajaron a 333.400 millones, lo que significa un superávit de aproximadamente 198.000 millones de euros.

Donald Trump se aferra a esa cifra para denunciar a viva voz que existe un desequilibrio comercial con Europa que debe ser subsanado. Por esa razón, planteó el aumento original de aranceles en 30%. Ursula von der Leyen jugó las cartas que tenía en la mano y logró bajar ese número a 15%, pero no sin entregar algo a cambio. Para calmar las exigencias de Trump, el bloque de los 27 se ha comprometido a invertir en Estados Unidos la suma de 750 mil millones de dólares en tres años, es decir, 250 mil millones al año. Una buena parte de esa compra irá destinada a las armas y material militar.

Europa defiende que el acuerdo reducirá la dependencia de Rusia

En ese sentido, el comisario europeo Maros Šefčovič explicó también que no se trata simplemente de comercio. La seguridad también está en juego: "Está claro que Europa necesita un suministro sólido y fiable de energía. No podemos seguir dependiendo de la energía rusa. Y no hablamos solo de gas, sino también de petróleo y energía nuclear".

Šefčovič hace referencia también a los semiconductores estadounidenses que, luego del acuerdo firmado este domingo, serán comprados en prioridad por delante de los chinos. Declara que es importante tener esos semiconductores disponibles ya que Europa está desarrollando centros importantes de Inteligencia Artificial. "No queremos que suceda lo mismo que nos pasó con los paneles fotovoltaicos chinos" –dijo el comisario europeo, haciendo referencia a la enorme dependencia de la UE a estos materiales, estimada en 80%.

En conclusión, el discurso oficial europeo se contenta con haber frenado a Donald Trump en un 15% de aranceles, especialmente cuando es evidente que la UE está en manos de Estados Unidos frente a la guerra en Ucrania. El comisario Šefčovič lo resumió con una nota que, para algunos, suena demasiado optimista: "Que podamos concertar en cuestiones comerciales y de seguridad es un valor increíble. Ahora sólo podemos ir a mejor".