El Ayuntamiento de Colau ve «proporcional» la actuación del agente que disparó a Sota

El Consistorio asegura que no hay pruebas que rebatan la versión policial sobre la muerte de la perra.

A mediadios de diciembre, Barcelona se despertaba con una de esas noticias que dan la vuelta al mundo gracias a las redes sociales. Una perra, Sota, moría tras el disparo de un agente de la Guardia Civil que quería desalojar a un sin techo de las inmediaciones de un hotel en la plaza España. El «hashtag» #justiciaparasota se hacía viral e incluso actores del panorama hollywodiense se preguntaban por el trato que dispensaba la Ciudad Condal a los animales. La alcaldesa Ada Colau, ante las críticas, se apresuró a anunciar una investigación sobre los hechos. Pues bien, el resultado, dado ayer a conocer, es que la actuación del agente de la Guàrdia Urbana fue defensiva y proporcional, según el comisionado de seguridad del Ayuntamiento, Amadeu Recasens.

Recasens señaló que el Ayuntamiento investiga cualquier disparo que se realiza en la ciudad, pero subrayó que las diligencias hechas en esta ocasión han sido «de las más completas». De hecho, detalló que se analizaron las comunicaciones de la sala conjunta y se pidieron imágenes de las cámaras de seguridad de los establecimientos de la zona aunque, «lamentablemente», por distintos motivos, ninguna registró los hechos.

Ante esta situación falta por ver si la ciudadanía responderá de la misma manera. Tras la muerte en diciembre de Sota, una improvisada multitud se concentró en la plaza Sant Jaume tras la convocatoria de Pacma. El partido animalista sospecha de la versión de los agentes. Los hechos ocurrieron en la plaza de Espanya de Barcelona, cuando una patrulla de la Guardia Urbana quiso identificar a una persona sin hogar. La policía asegura que el perro, corpulento y de razas cruzadas, atacó al urbano hiriéndole en el brazo y el agente disparó al animal al temer por su vida. Fuentes policiales informaron que el propietario del perro fue detenido porque, al ver lo sucedido, agredió al agente. Varios testigos aseguran que la perra se puso nerviosa y se abalanzó sobre el policía, mientras otros sostienen que no atacó a nadie. Pacma, por su parte, y citando a otra testigo, indicaba que «mientras el chico se acercaba al agente que tenía la extensible, le puso la rodilla en el cuello al perro, y efectuó un solo disparo a la cabeza». Las duras imágenes en las que el animal agonizaba tras haber recibido el disparo fueron difundidas en las redes sociales, con una mayor presencia en Twitter.

En su comparecencia en la comisión de presidencia y seguridad, Recasens quiso aclarar alguna de las informaciones que se hicieron públicas los días posteriores que no eran ciertas y señaló, por ejemplo, que no hubo ninguna llamada previa de ningún hotel u otra persona. Recasens apuntó que «con la información que hasta ahora se ha obtenido se desprenden hechos objetivos» que le permiten sostener que «la intervención fue defensiva y proporcional». El comisionado puntualizó que el caso se encuentra en disposición judicial y ha señalado que «si en el juicio aparecen nuevas pruebas» actuaremos en consecuencia.