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De vía de paso a corredor ecológico

El cambio de uso de las vías pecuarias obliga a la creación de un nueva normativa n El Consell ya ha aprobado un anteproyecto de ley para garantizar su protección

Las vías pecuarias recorren de norte a sur la Comunitat Valenciana. Su conservación las han convertido en corredores ecológicos donde habitan importantes especies de flora y fauna
Las vías pecuarias recorren de norte a sur la Comunitat Valenciana. Su conservación las han convertido en corredores ecológicos donde habitan importantes especies de flora y faunalarazon

Hay más kilómetros de vías pecuarias en el territorio valenciano que carreteras que pertenezcan a la Generalitat. 14.000 kilómetros frente 3.000. Tienen su origen en el traslado de los ganados a los pastos invernales en noviembre y a los estivales en mayo. Hay quien remonta su origen al siglo XIII y su importancia era ya tal que fueron protegidas por los reyes.

En la actualidad se han convertido en un patrimonio que debe protegerse y que obliga a la Administración a poner orden en estos espacios, que son de su competencia según el Estatuto de Autonomía.

El Consell ya ha dado su visto bueno al anteproyecto de ley de vías pecuarias elaborado desde la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente. Esta norma pretende clarificar su distribución y abrir su uso a actividades como el senderismo o cicloturismo, dada la disminución de la ganadería extensiva.

Se pretende que estos caminos calificados como bienes de dominio público y por tanto inalienables, imprescriptibles e inembargables se conviertan en un nuevo espacio de contacto con la naturaleza, donde tenga prioridad la trashumancia.

Las vías pecuarias se han mantenido como corredores ecológicos que conectan distintos espacios naturales. Su especial protección las han convertido en el lugar perfecto para muchas especies de fauna y flora valenciana.

La futura ley permitirá desarrollar la creación de una red de vías pecuarias clasificadas en cuatro categorías. Las cañadas, de anchura superior a 75 metros; cordeles, de no más de 37,5 ; veredas o azagadores, que medirán menos de 20 metros y coladas. La conformación de la red permitirá constituir un fondo documental en el que se registrará toda la información relacionada con las vías pecuarias. Este trabajo culminará con la aprobación de un catálogo de vías pecuarias.

El anteproyecto también regula la incidencia del planeamiento urbanístico en un trazado de una vía pecuaria que trascurre por un término municipial. Deberán quedar grafiadas y corresponderá a los Ayuntamientos procurar su integración y gestión. Si las vías pecuarias se localizan en suelos no urbanizables tendrán consideración de suelo no urbanizable de especial protección.