El edificio que Oltra quiere rehabilitar para instalar a los menores tiene aluminosis

El Consell dice que no hay que derribar la instalación de Llíria y los técnicos lo desaconsejan

Los plazos iniciales para poner en marcha un centro de recepción de menores en Llíria para dar solución la crisis generada tras el cierre del de Monteolivete podrían alargarse. LA RAZÓN ha tenido acceso a un nuevo informe técnico que advierte de que «el origen de la materia cementante es aluminoso». Se trata de una versión ampliada de un documento preliminar que apunta a que la rehabilitación inicialmente prevista podría ser insuficiente.

Este informe, encargado por el Ayuntamiento de Llíria, afirma que aunque no se han detectado lesiones asociadas a la aluminosis, «durante la ejecución de las rozas el hormigón de las viguetas resultaba blando al picado».

Así mismo, advierte de que en la «comprobación de la cimentación, se obtienen tensiones transmitidas al terreno mucho mayores a la admisible (...), por lo que no se cumplen las comprobaciones de la normativa actual».

Según la Conselleria Igualdad y Políticas Inclusivas, la existencia de aluminosis no impide la rehabilitación de un edificio, es más insisten en que existen muchas viviendas de los años 80 que, tras los trabajos de reparación necesarios, han vuelto a estar habitados.

Sin embargo, los técnicos consultados por este diario, advierten de que el informe es muy claro. La restauración de edificios afectados con aluminosis es mucho más costosa e incluso puede resultar peligrosa y por ello, apuntan a que es mejor proceder al derribo.

Ni una ni otra opción tienen por qué suponer un problema para los planes de la vicepresidenta y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, si no fuera por el presupuesto con el que se pretende afrontar esta actuación y porque los planes de obras, serían inevitablemente más largos de lo previsto.

A día de hoy, se han dispuesto 910.478 euros, una partida que los expertos consultados consideran insuficiente para acometer la actuación requerida.

Esta es la cantidad que se recoge en un convenio firmado por la Diputación de Valencia y el Ayuntamiento de Llíria en el que se transfiere dinero al Consistorio para que realice las obras necesarias para habilitar un edificio del antiguo reformatorio de Llíria, situado en los terrenos de El Prat, y convertirlo en un centro de recepción de menores de la provincia de Valencia.

Un centro de ámbito provincial para 2019

El alcalde de Llíria, Manolo Civera (PSPV), defiende que la ciudad necesita un centro de menores para dar atención también a la población de Llíria. Incide en que también son urgentes otras instalaciones sociales que

acompañarán a la construcción del primero. Se ha comprometido su puesta en marcha para enero de 2019.