Comunidad de Madrid

El Ayuntamiento ignoró a Patrimonio en su reforma integral de la Gran Vía

La Comunidad de Madrid lamenta la «imprudencia» del Gobierno de Carmena que no informó a la comisión regional sobre el proyecto de ampliación de aceras y de creación de zonas ajardinadas pese a afectar al entorno histórico de la Cerca de Felipe II.

El Ayuntamiento ignoró a Patrimonio en su reforma integral de la Gran Vía
El Ayuntamiento ignoró a Patrimonio en su reforma integral de la Gran Víalarazon

La Comunidad de Madrid lamenta la «imprudencia» del Gobierno de Carmena que no informó a la comisión regional sobre el proyecto de ampliación de aceras y de creación de zonas ajardinadas pese a afectar al entorno histórico de la Cerca de Felipe II

El Gobierno municipal del Ayuntamiento de Madrid publicó el jueves de esta semana el contrato para llevar a cabo las obras de remodelación de la Gran Vía sin haber informado a la Comisión Local de Patrimonio de la Comunidad de Madrid. Se trata éste de un paso necesario ya que una de las aceras de este calle, la que cruza con Montera y Callao, forma parte de un entorno protegido. En concreto, esta acera está integrada dentro de la Cerca y Arrabal de Felipe II. Cualquier actuación urbanística dentro del perímetro de esta zona, tanto en la vía pública como en el interior de un edificio, debe ser comunicada a la Comisión Local de Patrimonio. «En ninguna de las reuniones de la comisión de Patrimonio se ha hablado del proyecto de Gran Vía», aseguraba ayer el consejero de Cultura del Gobierno regional, Jaime de los Santos.

Tal y como adelantó ayer LA RAZÓN, el Ejecutivo de Manuela Carmena puso en marcha este jueves los mecanismos para llevar a cabo las obras en la Gran Vía mediante la publicación del expediente de contratación. En este documento, se fija el presupuesto de los trabajos en 9,3 millones, los plazos de ejecución en 13 meses así como las condiciones técnicas y económicas que deben cumplir las empresas que opten a esta adjudicación.

Las principales actuaciones del proyecto supondrán la ampliación de las aceras, la reducción de los carriles dedicados al tráfico y la creación de tres zonas ajardinadas en Montera, Callao y junto al edificio Metrópolis. Todas estas obras, especialmente las que afectan a la acera protegida, tienen que pasar obligatoriamente por alguna de las reuniones semanales de la Comisión de Patrimonio. Este diario quiso conocer ayer la versión del Gobierno de Carmena a este respecto, pero desde el Ayuntamiento señalaron que no iban a hacer ningún tipo de declaración. Sí lo hizo el Gobierno de Cifuentes a través de su consejero de Cultura: «Yo no he podido estudiar en profundidad esta idea, que seguramente es buena, pero tampoco la directora general de Patrimonio que es la responsable de calibrar hasta qué punto esto son ideas, aparte de buenas o malas, que respeten el patrimonio. Hay que ser responsables antes de dar ideas como cosas hechas, sobre todo cuando hablamos del patrimonio».

La directora general de Patrimonio, Paloma Sobrini, considera una «imprudencia» que el consistorio haya dado el paso de publicar el expediente de contratación y, con ello, dar por cerrado un proyecto cuando éste aún debe ser evaluado técnicamente por la comisión. «Es peligroso», concluye Sobrini, que recuerda que cualquier modificación dentro de la Cerca de Felipe II, ya sea la ampliación de una acera o la instalación de una marquesina, requiere del trámite que el equipo de Carmena ha obviado. En todo caso, Sobrini confía que en alguna de las próximas reuniones de la comisión, que se celebran todos los viernes, el Ayuntamiento cumpla con los requerimientos previstos en la normativa sobre entornos protegidos como éste.

Quioscos, fuentes y cabinas

Hay que tener en cuenta además que el proyecto diseñado por el área de Desarrollo Urbano Sostenible se traducirá en una transformación radical del aspecto actual de esta arteria del distrito Centro. Así lo pone de manifiesto el propio expediente de contratación. La memoria detalla que los trabajos supondrán, además de lo que tiene que ver con el reparto de espacio entre las aceras y la calzada, la incorporación de mobiliario urbano en las zonas estanciales previstas, la instalación de fuentes de beber accesibles y de un nuevo alumbrado público, la reordenación de los semáforos, señalización viaria, de las paradas de autobús así como también de los quioscos y terrazas y el refuerzo de la señalización de los nombres de las calles. Junto a ello, se procederá a levantar elementos que actualmente forman parte de esta calle como horquillas, bolardos, vallados peatonales, señales de tráfico, bancos, papeleras, jardineras, cabinas telefónicas, buzones de correos, instalaciones de publicidad (Mupis), estaciones de biciMAD, rejillas de alcorques y elementos esculturales como la maqueta de la propia Gran Vía.

A todas estas modificaciones menores –pero cuya aprobación también está sujeta al visto bueno de Patrimonio–, se une una de las grandes novedades que arroja el proyecto: los tres jardines dispuestos a lo largo de los 1.300 metros de esta calle. Estarán ubicados en Callao, junto al Edificio Metrópolis y en la confluencia de la calle Montera con Gran Vía y sumarán un total de 135 metros cuadrados de zonas verdes como parte de tres zonas estanciales. Y como parte de los trabajos previstos dentro del plan municipal también destaca la retirada de 116 árboles de las aceras y su sustitución por nuevas especies.

Este desencuentro entre el área de Desarrollo Urbano Sostenible –que dirige el edil de Podemos José Manuel Calvo– se suma al que ya hizo público el departamento de Sobrini esta semana por la falta de dos informes que justifiquen una valla en los jardines de Sabatini como parte de la reforma de la Plaza de España.