Una calle para Marcelino Camacho, si la Justicia lo permite

Además de una vía con su nombre, la alcaldesa anuncia una estatua en recuerdo del sindicalista.

En el acto en el que se rindió ayer homenaje a Marcelino Camacho, fundador del sindicato Comisiones Obreras, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, confirmó el compromiso del Gobierno municipal con su figura. Tendrá una calle con su nombre en la ciudad, también una placa y una estatua y, además, se programará algún homenaje en el que se recuerde su trabajo en la transición española y el movimiento sindicalista. «Quiero más presencia de Marcelino, de su devenir, de su lucha, de su trabajo para conseguir un trabajo mejor. Y lo tendremos», aseguró la ex jueza, que se reconoció como discípula y admiradora de Camacho: «Soy sobre todo consciente de la suerte que tuve como estudiante universitaria de contactar con la clase obrera cuando se insistía en la idea de la alianza de las fuerzas de la cultura y el trabajo porque eso era intelectualidad, eso era ciencia».

Entre los homenaje que el consistorio tiene en mente, podría incluirse una placa conmemorativa «en el lugar de la antigua Fábrica Perkins, donde tuvo lugar la primera reunión de la entonces incipiente CC OO». Se levantará una estatua en homenaje al sindicalista y será uno de los protagonistas del ciclo «Las Estatuas hablan», organizado por el Área de Cultura: «Una serie de vecinos y vecinas se reúnen en torno a esta figura ahora en piedra y de repente la memoria surge y las personas que se fueron y nos hicieron ser de determinada manera», explicó la alcaldesa.

En cuatro juzgados

El principal acto en recuerdo de Camacho, sin embargo, será el de ponerle su nombre a una vía del callejero de la ciudad. De hecho, la calle de Marcelino Camacho es una de las que el Comisionado de la Memoria Histórica incluyó en su dictamen final para suprimir las 52 vías y plazas que aún conservan reminiscencias franquistas: «Marcelino tiene preparada una calle. La calle que hoy se llama de Muñoz Grandes se llamará Marcelino Camacho». Este anuncio, sin embargo, tendrá que superar algunos obstáculos para convertirse en realidad. La Justicia, hasta ahora en cuatro ocasiones, ha paralizado el cambio de calles aprobado por el Pleno de Cibeles. Carmena, pese a todo, confía en que los juzgados den la razón al consistorio cuando entren a valorar el fondo de los recursos que distintos colectivos –la Fundación Francisco Franco o las asociaciones de ex legionarios y de familiares de los Caídos de la División Azul, entre otras– han formulado en los últimos meses: «Se resolverá el recurso y volverá la cordura, el buen hacer y la realidad de quitar las calles a aquellos que no les correspondía; la Ley de Memoria Histórica ordena que desaparezcan las calles de las personas que impulsaron el franquismo. El derecho tiene importancia y el derecho tiene que estar vinculada a la sociedad y a lo que necesita».

Pese a esta paralización judicial del cambio de nombre de estas vías, el callejero municipal online mantiene a día de hoy las nomenclaturas que no han entrado en vigor. Del mismo modo, el consistorio utiliza los nombres nuevos, pese a que están paralizados por la Justicia, en la comunicaciones que realiza a los vecinos sobre impuestos y multas.