Represalias

Noelia Posse, acusada de «purgas» y «vendettas» en el Ayuntamiento

La oposición reprueba el cese fulminante del interventor tras denunciar supuestos tratos de favor a empresas de Móstoles

La alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, durante un homenaje a los héroes del Dos de Mayo
La alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, durante un homenaje a los héroes del Dos de MayoA. Pérez MecaEuropa Press

«¿Purga política?», «¿represalia?», «¿un acto de soberbia?» o, simplemente, ¿pérdida de confianza por falda de una fiscalización adecuada en las cuentas del Instituto Municipal del Suelo (IMS) por parte del interventor? La gestión de la alcaldesa socialista de Móstoles, Noelia Posse, quedó ayer en entredicho por parte de los grupos de la oposición, incluido el que fue su socio de Gobierno hasta hace unos meses, Más Madrid, por el cese fulminante, un día después del 4-M, del que hasta hace unos días ha sido interventor en el Ayuntamiento de Móstoles durante los últimos 20 años. Y todo después de que éste denunciara al Tribunal de Cuentastratos de favor a empresas privadas a las que presuntamente perdonó impuestos municipales.Esto fue motivo, incluso, de que Más Madrid presentara una querella contra Posse por un presunto delito de malversación y prevaricación por «haber condonado la deuda pública a una ITV por valor de 2,5 millones de euros».

El cese del interventor fue motivo ayer de un pleno extraordinario en el que la concejala de Presidencia, Marisa Ruiz, defendió que el Ayuntamiento había cumplido con la legalidad vigente al cesar al interventor «por pérdida de confianza» al no considerar adecuada la fiscalización de las cuentas del IMS. Y no solo eso, trató en enturbiar su gestión relacionándole con la trama Gürtel y Púnica.

Pero ninguno de estos argumentos fueron admitidos por la oposición que reprobó el cese del técnico en base a un informe del Ministerio de Hacienda en el que se asegura que su actuación se ajusta a la normativa y no se apreciaba falta de diligencia.

«Suena a vendetta política», sentenció Israel Díaz (Vox). «El Gobierno local es una trituradora de personas donde no se admiten discrepancias», añadió. José Antonio Luelmo (Cs) avisó de que su grupo estaría vigilante sobre las empresas que se han podido beneficiar de la supuesta «amnistía fiscal» de Posse, mientras que Alberto Rodríguez (PP), condenó el «acto de soberbia» de la alcaldesa, «un grave error» que acabará en los tribunales. El cese «lo tumbará un juzgado y el precio lo van a pagar los mostoleños», advirtió Gabriel Ortega, de Más Madrid Ganar Móstoles. Éste, a su vez, citó la recomendación del Colegio oficial de Secretarios, Interventores y Tesoreros de restituir al técnico en su puesto al entender que «ha sido un cese arbitrario». Y no solo eso, aludió a un escrito de cinco de los siete sindicatos del Ayuntamiento de Móstoles en el que expresan su preocupación por lo que está ocurriendo en el gobierno del Ayuntamiento de Móstoles bajo la alcaldía de Noelia Posse.