Pichi, el robot que busca planes personalizados para los turistas que llegan a Madrid

Tradicionalmente, Pichi era el nombre de una canción que hablaba del estereotipo de la chulería madrileña, pero ahora es algo más: el nombre de un robot —al que tampoco le falta la chulería — que ofrece planes personalizados para los turistas que apuestan por visitar la capital. Este producto de la Inteligencia Artificial se encuentra en el Centro de Turismo de la Plaza Mayor (Pl. Mayor, número 27), una herramienta cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y accesible que ofrece atención especializada con una plantilla de profesionales expertos en turismo e idiomas que atiende personalmente a los visitantes y da respuesta también a todas las peticiones de información que se realizan de manera no presencial.

Y ahora, en adición a esos profesionales, cuenta con Pichi, que habla tres idiomas y no busca sustituir a un trabajador tradicional, sino ofrecer una atención amena y novedosa para derivar a los clientes a los profesionales. Pichi lleva pocos días en la oficina, pero ya genera estupor entre los turistas que llegan buscando información o comprar algún souvenir:

«Sorprende mucho ver un robot en una oficina de turismo, sobre todo por los movimientos tan humanos que hace con los brazos, con la cabeza o al acercarse. Pichi te pregunta con quién has venido a Madrid (distingue entre solo, con amigos, con pareja y con familia), te hace un escáner y, según la edad que detecte, te sugiere planes», explicó a LA RAZÓN la concejala delegada de Turismo, Almudena Maíllo, este lunes. En su visita a Pichi, también relató que lo que se busca con el robot es fomentar las visitas a las oficinas de turismo, pues quienes acuden a ellas tienen un valor añadido en comparación con quienes no.

Las oficinas tienen también las nuevas guías de realidad virtual con vídeos en 360 grados

Desde la oficina, se ofrecen informaciones y consejos para optimizar y aprovechar al máximo los días en Madrid. Además, se ayuda a saber qué lugares son más acordes para el turista, se hace que este se lleve el mejor recuerdo posible y gaste más en la ciudad. Por su parte, Pichi anima a recurrir a los profesionales, fomentando el contacto entre personas y la socialización madrileña, que se vio algo paralizada durante la pandemia. Respecto a los idiomas, y a la espera de que empiece a expresarse en otros, el robot habla español, inglés y francés.

Además, no se le resisten ni el chotis ni los autorretratos con los turistas. Maíllo recordó que esta iniciativa forma parte del plan de transformación de los servicios de atención turística al visitante, dándole más importancia a la digitalización y a la sostenibilidad, algo que se materializa también en la atención al visitante por WhatsApp, desde tablets o por teléfono; además de en las guías de realidad virtual con vídeos en 360 grados.