Respaldo total del alcalde al director general de la Policía Municipal de Madrid, Pablo Enrique Rodríguez. Ahora de baja médica, el coche oficial de Rodríguez atropelló, el 28 de abril, día del apagón, a una niña que iba acompañada de su madre. Desde Cibeles, el propio José Luis Martínez-Almeida deslizó públicamente que le habría gustado ser informado por el propio Rodríguez de los hechos. Desde la izquierda, acusaron al Consistorio de encubrir los hechos. Sin embargo, Almeida ha sido tajante en su defensa: tiene "todo el respaldo", tanto él como la Policía Municipal, que una semana después hizo público el atestado del suceso, cuyo resultado no gustó a los partidos de la izquierda en Cibeles

Además de defender el "currículum intachable y una formación académica extraordinaria" del director general de la Policía Municipal de Madrid, Almeida contestó a la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, que si tiene alguna duda sobre el atestado "lo que tiene que hacer es irse a un juzgado y presentar una demanda por delito de falsedad de documento público".

De acuerdo a ese atestado, la madre aseguró a los agentes que, según iba cruzando la calzada desde la acera con los números pares a los impares, el vehículo en el que viajaba Rodríguez, a su paso por el paso de peatones, golpeó con la parte trasera la rodilla de la niña, provocando su caída al suelo, lo cual no coincide con el testimonio de los testigos. «Cuando el vehículo sobrepasó (el paso de cebra), la mujer adulta tiró del brazo de la menor, provocando su caída, descartando el atropello inicial, sin poder determinar que la menor hubiera podido ser golpeada por la parte trasera lateral del vehículo», señalaba la Policía Municipal. Fue entonces cuando el conductor «se percató de la caída de una menor en mitad de la calzada», cuando estaba sobrepasando el paso de cebra.