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Los lunes de los alcaldes

Yunquera, alcalde de El Boalo, donde la izquierda ha presentado una moción de censura con un concejal no adscrito de Vox: «Con tal de que no gobierne la derecha todo vale»

El regidor popular, de 33 años, afirma que el PSOE madrileño le advirtió de la maniobra antes de que se registrara la medida y denuncia que la oposición pretende arrebatarle la alcaldía «por la puerta de atrás»

Sergio Yunquera, alcalde de El Boalo, Cerceda y Mataelpino, el pasado mes de abril. Gonzalo Pérez MataPHOTOGRAPHERS

Sergio Yunquera, alcalde de El Boalo, Cerceda y Mataelpino –el municipio de tres pueblos de 8.500 habitantes ubicado a 50 kilómetros de la capital–, se enteró por el PSOE regional de Madrid de que su oposición le iba a presentar una moción de censura. En las elecciones de 2023, Yunqueras, del PP, sacó 4 concejales. Formó un gobierno de coalición con Vox (2 concejales) y Somos Pueblo (1 concejal). En la oposición, seis concejales: PSOE (3) y BCM en común —una asociación de partidos de izquierdas: Izquierda Unida, Verdes Equo, Podemos, y Alternativa Ciudadana. Pero a principios de este año, el concejal de Vox José Olmos se salió del gobierno y se pasó a los no adscritos. Desde ahí comenzó un gobierno en minoría. «Ha sido un bloqueo constante». 6 contra 7. El PSOE-M le dijo a Yunquera que «bajo ningún concepto iban a permitir que el Partido Socialista llegara a una alcaldía de la mano de los votos de Vox», cuenta el regidor por videollamada. La portavoz socialista en el municipio, Soledad Ávila, que está investigada por la Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid por un supuesto caso de corrupción, afirmó en un entrevista en Cadena Ser que Olmos no entraría en el gobierno. Contesta Yunquera: «Hacen una moción de censura para seguir en minoría. Es llamativo porque a mí me echan en cara que no cuento con la mayoría suficiente en el pleno para sacar cosas adelante. Y lo van a hacer a 18 meses de elecciones». El regidor popular cree que «con tal de que no gobierne la derecha todo vale». Además, considera que lo que pasa en su municipio «es un experimento: a ver cómo reacciona la ciudadanía». Yunquera dice que se presentará a las siguiente elecciones de 2027, esté en el gobierno o en la oposición, cosa que se sabrá el próximo 12 de noviembre, en el pleno extraordinario para la moción de censura.

Desde que se fue el concejal de Vox a los no adscritos han gobernado en minoría. ¿Cómo ha ido la legislatura desde ese momento?

Ha sido una legislatura de bloqueo constante. El concejal no adscrito de Vox, en el momento en que deja el gobierno por desavenencias con su grupo político y también por deficiencias importantes en su gestión, cuando se le pidieron explicaciones respecto a esa gestión, salió por el camino fácil, que era irse del gobierno. Se alineó completamente con la izquierda y, desde el momento en que se fue, ha votado en todos los plenos alineado con la izquierda, excepto en contadas ocasiones. En todo lo que respecta a la gestión del Ayuntamiento —modificaciones presupuestarias, asuntos urbanísticos—, siempre ha votado en la misma línea que la izquierda.

¿Cómo ha afectado ese bloqueo a los vecinos?

Nos ha ralentizado muchísimo la gestión. Al final, hemos tenido que llevar muchas cosas varias veces al pleno para que recapacitaran. Nos han demostrado que, cuando votas por votar no, tienes muchas probabilidades de cometer errores y tu voto en contra afecta directamente a cosas buenas para el municipio. Se han enfrentado en varias ocasiones a posibles denuncias por parte de terceros, ya que han votado en contra de desarrollos urbanísticos que contaban con los informes favorables del secretario, de los técnicos y de la Comunidad de Madrid. A veces se han visto forzados a pedirme que lo volviese a llevar al pleno porque habían recapacitado sobre su posición al darse cuenta de los errores cometidos. Simplemente se han alineado desde el primer momento en: “Como tenemos la mayoría, vamos a votarle que no a todo al alcalde para hacerle la legislatura imposible.”

¿Ha seguido siendo buena la relación con el concejal de Vox en el gobierno?

Sí. El concejal que forma parte del equipo de gobierno, la relación ha sido buena, con las diferencias políticas lógicas que hay. En lo personal, la relación ha sido fantástica. Ha sido una persona honesta, honrada y leal en todo momento. José Miguel, el concejal que ha seguido en el gobierno, ha mantenido su lealtad tanto con el Partido Popular como con el alcalde.

¿Cuándo y cómo se enteran de que preparaban una moción de censura al gobierno?

Nos pone en advertencia el Partido Socialista (regional). Ellos nos transmiten un mensaje de tranquilidad inicialmente, diciendo que el Partido Socialista está en el pacto antitransfuguismo y que bajo ningún concepto van a permitir que el Partido Socialista llegue a una alcaldía de la mano de los votos de Vox. Textualmente, nos dijeron que jamás permitirían que un alcalde socialista fuera alcalde gracias a los votos de Vox. De hecho, salió un comunicado de Pilar Sánchez Acera en el que decían claramente que rechazaban la moción de censura y hablaban en términos de que la habían parado. Unos días después, gracias a la información que nos transmite el Partido Socialista, se ponen en contacto con nosotros para informarnos de que, pese a haberles advertido de las consecuencias del “pacto Frankenstein”, no eran capaces de controlar a sus concejales y que tenían claras intenciones de llevar la moción de censura a cabo, aunque eso supusiera que el propio partido los expulsara.

No es algo habitual que pase algo así con el PSOE.

No, no es algo habitual. Pero aquí, más allá de la ideología o de los partidos políticos, hay una cosa clave: el sentido común y la razón. Somos un pueblo de cerca de 10.000 habitantes, a 50 km de la capital de España, que forma parte de la Comunidad de Madrid. El Partido Socialista no se puede permitir, bajo ningún concepto, esto, cuando el presidente del Gobierno habla de la ultraderecha y de que todo es negociable excepto con Vox. Tenemos un PSOE a nivel nacional que pacta con Bildu, con Convergència, con Esquerra Republicana de Cataluña, pero con Vox no. Que ahora, en un municipio de la Comunidad de Madrid, se presente una moción de censura contra un alcalde del Partido Popular gracias a los votos de un concejal tránsfuga de Vox es algo que pone al Partido Socialista en una situación bastante comprometida. Yo agradezco la honestidad y que el Partido Socialista se haya posicionado de palabra en la línea de que no están conformes y que, en el caso de que lo hagan, serán expulsados. La realidad es que llevamos ya dos días desde que se presentó la moción de censura y no hay ni un solo comunicado del Partido Socialista. Lo único que hemos encontrado es silencio absoluto.

¿Qué razones han dado para la moción de censura?

Unas razones vacías de contenido. Básicamente, que yo no he sabido gestionar mi situación de minoría, que no le he dado el cariño suficiente al concejal de Vox tránsfuga, como si la política fuera dar cariño. La moción, casi hecha por inteligencia artificial, habla de inoperancia política, ineficiencia en la gestión y malos modales del alcalde en los plenos. Esos son los argumentos que han dado. Los partidos que presentan la moción no consiguieron entre los dos más del 36% de los votos. Es decir, va a gobernar el 36% de los votos, ya que este concejal tránsfuga ha reconocido que no entraría en el gobierno. Por lo cual, hacen una moción de censura para seguir en minoría, lo cual es llamativo, porque a mí me echan en cara que no cuento con la mayoría suficiente en el pleno para sacar cosas adelante. Y lo van a hacer a 18 meses de elecciones.

¿Qué espera que pase en la votación del 12 de noviembre?

Creo que puede pasar de todo. La lógica me lleva a pensar que la moción sí saldrá adelante. Ahora, conociendo a las personas que la promueven y pendiente de la situación del Partido Socialista, si esta gente es expulsada, estaríamos hablando de que van a hacer una moción de censura cuatro tránsfugas. Y casi los siete serían tránsfugas, porque si Podemos, Izquierda Unida y Los Verdes se descuelgan, estaríamos hablando de una moción impulsada por siete tránsfugas con una alcaldesa tránsfuga. Este concejal de Vox, conociéndole, no sabe muchas veces lo que vota. Con esos antecedentes, todo es esperable. No obstante, el documento está firmado y entregado en el registro municipal, por lo cual entiendo que saldrá adelante.

En caso de que prosperara la moción, ¿seguiría en la oposición?

Sí, por supuesto. Nosotros somos, ante todo, demócratas y garantes del respeto a las instituciones. Con la cabeza muy alta y con la sensación del trabajo bien hecho, nos iremos a la oposición. Haremos oposición durante este año y medio que queda para las elecciones. Mi intención, si mi partido y mi familia lo tienen a bien, es volver a presentarme en 2027.

¿Qué opina de que se junte la izquierda con Vox?

Esto es extrapolable a todo. A nivel autonómico y nacional. Tenemos a un Partido Socialista que ha renunciado a sus principios. Y ahora esto es un paso más. Demuestra que es un paso más del “todo vale”. Hoy es un ayuntamiento; mañana, si es necesario, será una autonomía o incluso el Gobierno central. Con tal de que no gobierne la derecha, todo vale. El enemigo a abatir es el Partido Popular. Aquí lo que nos están demostrando es que, si llegado el caso les dan los números, el Partido Socialista es capaz de pactar con Vox con tal de que el PP no gobierne. Esto es un experimento. Lo que va a pasar en El Boalo, Cerceda y Mataelpino es un experimento para ver cómo reacciona la ciudadanía. Si hoy lo hacen aquí, nos están demostrando que son capaces de hacerlo mañana en la Comunidad de Madrid.

Independientemente de lo que salga en la moción, ¿en qué lugar deja a los vecinos?

Yo creo que deja a los vecinos en una situación de indefensión. Me han llamado muchísimos vecinos votantes de Vox que se sienten completamente traicionados. Imagínese un vecino que ha votado a Vox y ve cómo su voto sirve para que la izquierda gobierne en el municipio; es algo aberrante. De la misma manera, me he encontrado con mucha intranquilidad, molestia y malestar entre votantes de izquierdas, votantes del Partido Socialista, que me han transmitido: “Creemos en el Partido Socialista, pero así no, así no”. El mensaje es que no todo vale con tal de estar en el poder. Puedo decir que mi partido político tiene las ideas bastante claras. Por encima de todo están nuestros principios y no somos iguales. Yo podría haber mantenido esa mayoría absoluta dándole absolutamente todo lo que me pidiera este concejal tránsfuga. No lo he hecho, asumiendo las consecuencias de la posible moción de censura, porque los principios están por encima de todo. Todo mi equipo del Partido Popular venimos a la política con muchísima ilusión y con nuestra vida solucionada. Todos tenemos nuestros trabajos fuera de la política. Yo tengo una excedencia forzosa por cargo público. El día que finalice mi mandato volveré a mi trabajo, que es lo bueno que tiene cuando tienes un empleo estable, y tengo la tranquilidad de ser fiel a mis principios cuando no dependes de un sueldo. Esta gente sí depende de un sueldo. La portavoz del Partido Socialista lleva casi 16 años viviendo de la política municipal.

¿Ha intentado hablar con alguno de estos siete concejales?

Por supuesto. Si usted tiene claro que va a presentar una moción de censura, la prepara, la firma y la presenta de forma inmediata. Llevamos casi un mes desde que se anunció esa posible moción de censura, y se ha estado mareando la perdiz. Ha sido bochornoso. La imagen y la intranquilidad que se ha generado a los vecinos es un daño irreparable. Hemos hablado con ellos. Yo me he reunido personalmente con personas del Partido Socialista. He intentado reunirme con personas de BCM en Común y de Podemos. No ha sido posible. Solo he conseguido tener conversaciones telefónicas con ellos y me he reunido en persona con este concejal tránsfuga de Vox. Este concejal iba diciendo por el pueblo que todo esto lo hacía por venganza y por ajustar cuentas, porque tenía un problema personal conmigo. Después de escuchar esas barbaridades, Cuando me reúno con él y le pregunto: “Oye, mira, yo vengo aquí antes de hablar de política a saber cuáles son los problemas personales que te están llevando a hacer esto”, la respuesta que recibo es: “No, Sergio, si yo no tengo ningún problema personal”. Ante personas que viven una realidad paralela y no son conscientes de la situación, poco se puede hacer. Políticamente, lo que realmente estamos viviendo aquí es un fin de ciclo. Esta gente ha estado gobernando durante más de 12 años, y la gente no les ha dado la confianza. Se la dieron al Partido Popular, y ahora se la pretenden arrebatar por la puerta de atrás. No tienen la mayoría para gobernar y necesitan a un tránsfuga de Vox.

¿Se volverá a presentar, esté en la oposición o en la alcaldía?

Me volveré a presentar en cualquiera de los casos. Soy una persona joven, tengo 33 años y mucha energía todavía.

Si lo grave de esta legislatura era el bloqueo, el escenario seguirá siendo el mismo tras la votación del 12 de noviembre.

Seguirá habiendo bloqueo porque no van a contar con la mayoría. Nosotros hemos venido a hacer otro tipo de política y no vamos a entrar en estos rodillos que nos impone la izquierda. Por supuesto, todo lo que sea bueno para el municipio contará siempre con el apoyo del Partido Popular. Por encima de todo está el pueblo.