La utilización de hidrógeno como combustible no es algo nuevo. Mezclado con oxígeno en un balón, propulsó el primer motor de combustión de la historia, en 1813. Las primeras aeronaves también se nutrieron de hidrógeno, pues era más liviano que cualquier otro elemento químico y eso facilitaba su ascensión. Pero había un problema: era escaso y, por ello, poco económico. Además, aún no existía una tecnología capaz de impulsar su aplicación a gran escala. Así que el mundo se olvidó del hidrógeno y de sus posibles aplicaciones para la movilidad.

Dos siglos después, la demanda mundial actual de hidrógeno es de más de 70 millones de toneladas anuales. La mayoría se usa en procesos industriales difícilmente electrificables (refino y desarrollo de fertilizantes), pero también como solución para descarbonizar el transporte pesado. Y así, este mes se efectuó la primera carga de un camión propulsado por hidrógeno verde en la planta de Iberdrola en la Zona Franca de Barcelona. Es la primera vez que un vehículo de estas características recarga en España, lo que supone un importante avance para el desarrollo de la utilización de hidrógeno 100% verde producido con energía procedente de fuentes renovables y con cero emisiones de CO2.

La operación se realizó con un camión de la marca Hyzon al servicio de la empresa Clean Energy Ventures. Todo se desarrolló «sin problemas, lo que demuestra que la instalación está lista para atender las necesidades de hidrógeno verde del sector de la logística», señalan fuentes de la compañía energética. De hecho, se trata de la primera planta comercial de producción y suministro de hidrógeno verde de uso público en España.

En ella han parado a repostar con éxito buses y turismos. Iberdrola la puso en marcha en menos de un año, para dar servicio a la flota específica de autobuses metropolitanos de Tansports Metropolitans de Barcelona (TMB). De hecho, ya hay ocho autobuses de hidrógeno verde en circulación por la ciudad condal que repostan diariamente en la hidrogenera.

Ya en inicio, la instalación fue diseñada para tener suficiente capacidad para poder atender a otros clientes. De manera reciente, la energética firmó un acuerdo de colaboración con Evarm, empresa catalana especializada en la transformación de vehículos profesionales a combustibles alternativos, por el que su flota podrá repostar en la hidrogenera de la compañía. Esto ha convertido a la firma catalana, especializada en la transformación de vehículos profesionales a combustibles alternativos, en el primer cliente privado en hacer uso del combustible renovable generado en la planta barcelonesa y en el primero en hacerlo en turismos.

A los avances en hidrógeno verde aplicado a la descarbonización del transporte hay que sumar otro hito. En mayo de este año Iberdrola inauguró en Puertollano (Ciudad Real) la mayor planta de hidrógeno verde para uso industrial de Europa. La central cuenta con un electrolizador capaz de producir 3.000 toneladas de H2 renovable al año. Con una inversión total de 150 millones de euros, podrá evitar la emisión de hasta 48.000 toneladas de CO2 anuales.

La electricidad necesaria para la producción del hidrógeno proviene de una innovadora planta solar fotovoltaica de 100 megavatios (MW). Además, se trata de la primera instalación de la compañía en España que cuenta con paneles bifaciales (son sensibles a la luz por ambas caras). La planta solar tendrá una producción anual de unos 156.000 MW/h, evitando así la emisión de más de 30.000 toneladas de CO2 al año.

El hidrógeno verde producido en la planta de Iberdrola se podrá utilizar en la fábrica de amoniaco que el Grupo Fertiberia tiene en Puertollano que, gracias a esta tecnología, podrá reducir en hasta un 10% las necesidades de gas natural en la planta. Fertiberia se convierte así en la primera compañía europea de su sector que desarrolla una experiencia a gran escala de generación de amoniaco verde.

En su apuesta por liderar la transición energética, Iberdrola lleva ya mucho camino recorrido. En la actualidad, encabeza el desarrollo del hidrógeno verde con más de 60 proyectos para responder a las necesidades de electrificación y descarbonización de sectores como la industria o el transporte pesado. Sus últimos avances frente al reto tecnológico que supone la producción y el suministro de hidrógeno verde consolidan a la energética como empresa referente en la aplicación de esta tecnología sostenible en nuestro país.