Sección patrocinada por sección patrocinada

Medio ambiente

Guerra del agua con Portugal: “España no cumplirá con los caudales anuales en los ríos Tajo y Duero”

Un comunicado de ambos gobiernos hecho público hoy reconoce que el flujo estará un 10% por debajo de lo acordado, debido a la fuerte sequía

La contaminación farmacéutica se detectó en los ríos de todos los continentes. En la imagen, un piragüista en el río Tajo
La contaminación farmacéutica se detectó en los ríos de todos los continentes. En la imagen, un piragüista en el río TajoJesús G. FeriaLa Razon

España y Portugal, dos países amigos, vecinos y aliados, mantienen, sin embargo, una guerra soterrada que podría lastrar esas buenas relacionas. Y el motivo del conflicto no es otro que el agua y el caudal de los ríos compartidos Tajo y Duero, que nacen en tierras españoles y desembocan en el océano Atlántico luso.

¿Cómo y por qué surge el conflicto? Portugal acusa a España de no cumplir con los caudales anuales pactados para ambos ríos y, de hecho, el Gobierno de Sánchez asume este incumplimiento en un comunicado conjunto en el que se prevé que dicho caudales estarán un 10% por debajo de los valores previstos por el Convenio de Albufeira.

Dicho comunicado se ha hecho público este miércoles por la tarde, después de que el lunes se conociera el desfase en el Duero y, esta mañana, el Ministerio español para la Transición Ecológica (Miteco) anunciara un acuerdo con nuestro país sobre los flujos.

“Como consecuencia de la fuerte sequía que se ha registrado en Portugal y España, el año hidrológico 2021/22 ha sido extremadamente exigente en lo que respecta a la gestión de los recursos hídricos. Durante este período los valores de lluvia fueron mucho más bajos y las temperaturas fueron mucho más altas que los valores promedio. Como consecuencia de esta situación, los niveles de los embalses de ambos países se encuentran, en general, muy por debajo de los valores normales para las cuencas internacionales compartidas. Los registros desfavorables de precipitación y temperatura, combinados con reservas de agua por debajo de la media de los últimos 10 años en la parte española de todas las cuencas hidrográficas compartidas, han complicado la gestión de los caudales”. reza el texto.

“A pesar del esfuerzo realizado y con el año hidrológico llegando a su fin, España no cumplirá”, dice el comunicado, en el que ambos países subrayan las dificultades relacionadas con la gestión de los recursos hídricos debido a la situación de sequía y los bajos niveles de agua en los embalses.

Además, dado que las previsiones meteorológicas apuntan a que las precipitaciones se van a mantener por debajo de los registros medios en los próximos meses, “es fundamental asegurar la disponibilidad de agua y gestionar de forma coordinada la liberación de caudales al inicio del próximo ciclo hidrológico”, explican.

“De común acuerdo con Portugal se tomó la decisión de reducir la descarga de agua de los embalses hidroeléctricos durante esta última semana del año hidrológico, ante la evidencia de que lo estipulado en el Convenio de Albufeira no será del 100% acordado.”, explicó el Miteco al diario portugués Jornal de Noticias.

En este sentido, está previsto reforzar la coordinación en la gestión de los recursos hídricos, la mejora de los diagnósticos y la búsqueda de soluciones a las limitaciones que comprometen el cumplimiento de los objetivos del Convenio de Albufeira , como son, fundamentalmente, el suministro de agua a las poblaciones para el consumo humano fundamentalmente y en los usos para el riego agrícola.

Por este motivo, antes de que finalice el presente año, representantes de ambos gobiernos mantendrán reuniones al más alto nivel para hacer balance del año hidrográfico y planificar el futuro.

“España no cumplirá con los caudales anuales en los ríos Tajo y Duero, que se prevén en torno al 90% de los valores establecidos en el convenio”, según el cual nuestro país debe mantener un caudal de 3.500 hectómetros cúbicos (hm3)/año en el Duero y 2.700 hm3/año en el caso del Tajo.

“Es un incidente diplomático complicado y una pérdida de soberanía”, dijo al diario luso JN el presidente de la organización medioambiental ZERO, que a principios de este mes advirtió que España estaba secando los ríos.

ZERO realizó una evaluación de los resultados relativos a los caudales de los tres principales ríos internacionales (Duero, Tajo y Guadiana) desde el inicio del año hidrológico, que va de octubre de 2021 a septiembre de 2022, en base a las estaciones hidrométricas previstas o equivalentes en el Convenio de Cooperación para la Protección y Aprovechamiento Sostenible de las Aguas de las Cuencas Hidrográficas Luso-Españolas. Los datos de caudal fueron tomados del Sistema Nacional de Información de Recursos Hídricos y la información fue considerada hasta el 3 de septiembre inclusive.

Esta asociación defiende que la situación del Tajo y de todos los ríos internacionales, junto con una revisión del Convenio de Albufeira, debería conducir a los gobiernos de España y Portugal, en línea con lo dispuesto en la Directiva Marco del Agua, a alinearse con la planificación y gestión de cuencas hidrográficas que establezcan verdaderos caudales ecológicos capaces de asegurar la conservación y el funcionamiento de los ecosistemas y alineados con la necesidad de garantizar el buen estado ecológico de las masas de agua.

Para Francisco Ferreira, presidente de Zero, había varias posiciones posibles: “Escalar desde el punto de vista del incumplimiento, aprovechar la vulneración del convenio para exigir o aceptar condescendientemente lo que hizo España”. Al optar, entiende el ecologista, por la tercera. “Si aceptamos y entendemos sin compensación que España no cumple, entonces ¿de qué sirve el convenio de Albufeira?”, se pregunta.

Otras fuentes lusas hablan también de una situación grave, “con pérdidas económicas en términos de producción de electricidad”, de “efectos nocivos muy grandes sobre la calidad del agua y la mortalidad de los peces”... Por su parte, el especialista en recursos hídricos Rui Cortés advirtió que “esta guerra del agua se incrementará con el cambio climático, el aumento de las zonas de regadío y los cultivos intensivos”.