Con el inicio de producción en la fábrica de Gante (Bélgica) del C40 Recharge, su último modelo eléctrico puro, Volvo da un paso más en el proceso de electrificación de sus productos. La empresa sueca se ha comprometido a que en 2025, es decir, dentro de tres años, la mitad de su producción sea de vehículos electrificados. Esta proporción llegará al 100% en el año 2030. Esto significará que la totalidad de los Volvo que salgan de las cadenas de montaje al final de la presente década serán eléctricos.

El C40 Recharge es el segundo modelo totalmente eléctrico de Volvo Cars y el más reciente de una serie de nuevos vehículos eléctricos puros que se lanzarán al mercado durante los próximos años. Para 2030, Volvo Cars pretende comercializar únicamente vehículos eléctricos puros, una de las estrategias de electrificación más ambiciosas del sector del automóvil. Además, para 2040, tiene la intención ser una empresa sin impacto sobre el clima. La fábrica de Gante, una de las más grandes de la marca, también fabrica el XC40 Recharge, la versión totalmente eléctrica de este SUV compacto que es también el primer modelo eléctrico puro de Volvo. La capacidad de producción de vehículos eléctricos de esta factoría llega a 135.000 vehículos al año y ya prevé que en 2022 más de la mitad de la producción corresponderá a vehículos eléctricos puros.

La empresa presentará nuevos modelos eléctricos durante los próximos años con el objetivo antes señalado de que la mitad de las ventas globales corresponda a vehículos totalmente eléctricos para 2025 y convertirse en un fabricante de vehículos exclusivamente eléctricos para 2030. El C40 Recharge es por ello un vehículo emblemático para la nueva estrategia comercial de la empresa. Por el momento está disponible por Internet y los clientes pueden encargarlo desde su ordenador o realizar un pedido «online» desde el concesionario. Los clientes reciben además una serie de ventajas como servicio, garantía y asistencia en carretera, seguro y opciones para la recarga en casa.

Este modelo es más bajo y estilizado y la parte trasera tiene un diseño que se adapta a la línea del techo, más baja que en otros modelos, mientras que la parte delantera muestra ya la nueva imagen de los Volvo eléctricos, incluyendo la tecnología de píxeles de los faros. En su interior ofrece la posición de asiento elevada que tanto gusta a la mayoría de los conductores y se puede elegir con opciones decorativas exclusivas. También es el primer modelo de Volvo en el que no se ha utilizado cuero.

Respecto al equipamiento, el C40 Recharge lleva un muy buen sistema de infoentretenimiento basado en el sistema operativo Android y desarrollado en colaboración con Google. Ofrece a los usuarios aplicaciones y servicios de Google integrados, como el Asistente de Google, Google Maps y Google Play. También ofrece datos ilimitados, lo que supone una conectividad extraordinaria, y recibirá las actualizaciones del software por vía inalámbrica, lo que significa que seguirá mejorando después de salir de la fábrica. La propulsión consta de dos motores eléctricosque rinden una potencia conjunta equivalente a 408 cv alimentados por una batería de 78 kWh de carga rápida: del 10 % al 80 % en unos 40 minutos. La autonomía esperada está en torno a los 420 km.