Política

Los privilegios

El trasvase de ultraizquierdista a ultraconservador es un viaje que en Francia es ya habitual y que aquí apenas está empezando

Ante el veintitrés por cien de votos conseguidos por Marine LePen en el país vecino, uno de los estereotipos más emitidos estos días es que la izquierda no es capaz de comprender como el tradicional voto obrero está abandonándola para pasarse a la derecha populista. Esa reflexión es un tópico insoluble de casi toda tertulia que se precie, pero, como suele suceder casi siempre, es un lugar común totalmente falso.

La izquierda en realidad sabe perfectamente por qué le está abandonando su votante tradicional. Lo que sucede es que, primero, no puede reconocer de ningún modo en público esas razones; segundo, no sabe qué hacer para darles solución; tercero, si diera con la manera más obvia para arreglarlo y sortear esos motivos, sus líderes serían incapaces de aplicar esa línea de acción porque iría contra su estatus.

Conversando con el espectro de población de trabajadores y clases medias modestas de los barrios, uno descubre muy rápidamente que esos habitantes son perfectamente conscientes que ninguno de ellos podrá disponer en el futuro de una pensión tan generosa como la de sus supuestos defensores parlamentarios de clase. Tampoco podrán disfrutar este mes de unas dietas generosas para superar la etapa inflacionista que se nos viene encima. Ni podrán viajar a lugares variopintos con la excusa de su trabajo. El abandono de las izquierdas por parte de esas clases se proyecta en las conductas de perfiles muy concretos como podría ser, por ejemplo, el de mi paisano Rafael Ribó. Era un hombre supuestamente de izquierdas, pero su labor ha puesto en duda esa premisa, fosilizándose durante años en un cargo de alto coste inmovilista, discutido por aquellos mismos a los que supuestamente tenía que defender. El trasvase de ultraizquierdista a ultraconservador es un viaje que en Francia es ya habitual y que aquí apenas está empezando. No será ni más lento ni más rápido de lo que se tarda en ir de Vallecas a Galapagar.