45 líneas

A vueltas con la demagogia fiscal

En la guerra fiscal desatada entre PSOE y PP tienen los socialistas todas las de perder

Es enorme la rabieta del Gobierno a cuento de la decisión de los ejecutivos regionales del PP en Andalucía, Murcia y Madrid de bajar parte de aquellas tasas impositivas sobre las que tienen competencia. Han respondido a las bravas los ministros, abrazando la antigua propuesta de Podemos sobre el impuesto a las grandes fortunas. Un gravamen en realidad con poco recorrido, aireado más como demagogia fiscal cara a la galería que como resultado de un análisis sosegado sobre su rendimiento.

En la guerra fiscal desatada entre PSOE y PP tienen los socialistas todas las de perder. Ir a unas elecciones (autonómicas o generales) diciendo a los votantes que van a tener una mayor presión impositiva es algo tan insólito como suicida, máxime sabiendo la gente que el Estado está haciendo caja con la inflación, con un mayor ingreso por IVA y demás gravámenes. Al final, a Sánchez lo están llevado a rastras a algo que él nunca quiso, de manera que se ha visto en la obligación de reducir el IVA al gas, a la luz y las mascarillas pese a no contemplarlo en su programa electoral y tras haber manifestado diferentes ministros su total oposición a la medida. De modo que de aquí a los próximos comicios, no habría que descartar nuevos recortes a la imposición, sobre todo porque el empuje del PP y de Feijóo es total, y eso tendrá reflejo en las urnas.

Los populares hacen bien en disminuir la presión fiscal autonómica. El problema es que ninguno de ellos ha anunciado un plan paralelo de reducción del gasto público, algo que dadas las circunstancias parece más que obligado.