ETA y los mensajes cruzados

El Gobierno y el PSOE nacional sostienen que Batasuna sigue siendo la misma y un dirigente socialista dice lo contrario, pero no pasa nada. Gobierno y PP apuran los minutos para sellar un acuerdo que aumente el cerco al "brazo político"de ETA, mientras en público los del PP siguen alimentando la sensación de que no se fían del Ejecutivo. Gobierno y PP consensúan la nueva Ley de Víctimas del Terrorismo, mientras que destacadas voces del principal partido de la oposición, como Jaime Mayor Oreja, afirman que se está preparando el terreno para callar a las víctimas ante la segunda parte del "proceso"de negociación que se nos viene encima. Los dos partidos nacionales mantienen un acuerdo en política antiterrorista, que se ha demostrado que es el instrumento más eficaz, pero no parece que hasta ahora se hayan sentado a discutir cuál es la "hoja de ruta"más adecuada para aprovechar el momento de debilidad extrema de la banda terrorista. Detrás del cristal hay un juego de poses para las respectivas parroquias. Ni en el PSOE renuncian a las "tomas de temperatura"ni a creer en la capacidad de la "izquierda abertzale"de desligarse de ETA, aunque hasta hoy no haya ni una prueba para tener esa esperanza; ni en la dirección del PP se creen que el Gobierno pueda caer en la tentación de abrir otra negociación como la de la pasada Legislatura. Demasiadas contradicciones en público, mientras ETA sigue a lo suyo.