Insensateces

Desatender

¿Y si no fuera una mala idea? ¿Y si el problema es que sean Ayuso y Vox los que la defiendan?

Isabel Díaz Ayuso ha creado un centro para hombres víctimas de violencia sexual porque, asegura, su Gobierno ha detectado que muchos varones han sufrido este tipo de abusos. Lo abrirá en 2025 con una inversión de 700.000 euros. La medida, de manera evidente, tiene detrás una estrategia política clarísima y que no es otra que arrebatar a Vox una de sus banderas. Según contó la presidenta de la Comunidad de Madrid, el público objetivo de ese centro serían menores masculinos que son víctimas de violencia sexual en la infancia y hombres adultos que la sufren en el entorno de prácticas sexuales y que tienen muchas dificultades para denunciarlo.

Hay algunos datos interesantes para poder baremar si la idea merece la pena o es una ocurrencia frívola. El año pasado, el 86% de las agresiones sexuales fueron a mujeres y el 14% a niños y hombres adultos. La Comunidad de Madrid ha disminuido en los últimos años el número de pisos destinados a acoger a víctimas de violencia machista. Diversas asociaciones que las protegen a esas mujeres han tenido que pedir créditos para poder seguir prestándoles servicio y ayuda. Es decir, a nadie se le puede ocurrir defender la gestión de Ayuso sobre violencia de género y hay un intento claro de mezclar churras con merinas, hombres y mujeres, para que se puedan eliminar las perspectivas de género o las políticas concretas dirigidas a mujeres. Eso está claro y meridiano. Ahora bien, volvamos al centro para hombres.

¿Y si no fuera una mala idea? ¿Y si el problema es que sean Ayuso y Vox los que la defiendan? Porque la realidad demuestra que es verdad que existen niños que han sufrido abusos. Demuestra, además, que les cuesta más contarlo. Y que hay hombres que participan en determinadas prácticas sexuales que pueden acabar en agresiones y relaciones no consentidas. Son menos que las niñas y mujeres que padecen abusos sexuales, efectivamente. Pero existen, están ahí. Y no puedo entender la necesidad y en énfasis en banalizar algo tan grave. Es una buena noticia la apertura de ese centro pese a que los femeninos sigan siendo insuficientes. No debemos admitir que se desatiendan sufrimientos.