Constitución

La reforma constitucional como mera consigna

La Razón
La RazónLa Razón

Pese a la insistencia de las distinta formaciones de la izquierda española en la urgencia de abordar la reforma de la Constitución, ningún grupo ha tenido a bien activar el correspondiente mecanismo legislativo en el Congreso de los Diputados. De hecho, ninguna de las subcomisiones previstas para el actual periodo de sesiones tienen como objetivo el estudio de las reformas a introducir en la Carta Magna, lo que deja el problema en una mera declaración de intenciones o, mejor dicho, en una consiga política sin mayor contenido. Y en esta ocasión, los partidos de la oposición no pueden escudarse en la falta de mayoría para iniciar el procedimiento parlamentario. Incluso el PP, consciente de la matemática del Congreso, se ha mostrado dispuesto a participar en los trabajos a que dieran lugar las propuestas opositoras. Sin duda, la izquierda española es consciente de que, más allá de la propaganda, ni existe el mínimo consenso político para afrontar una cuestión tan compleja ni, ciertamente, hay una demanda social claramente mayoritaria para llevarla a cabo. Como publicaba ayer LA RAZÓN, a raíz de una encuesta de NC Report al respecto, los españoles están satisfechos con el modelo constitucional y no identifican qué cambios serían prioritarios.