El trípode

Un soplo de aire fresco

La Constitución que ayer juró la Princesa Leonor considera la figura del Rey/Reina como «Jefe del Estado y símbolo de su unidad y permanencia», lo que en los tiempos que vivimos es una muy delicada responsabilidad.

La jornada de ayer fue como un soplo de aire fresco en España tras demasiados días con un Gobierno en funciones y con excesivos actos poco edificantes realizados para intentar continuar, no ya instalados en la provisionalidad actual, sino en la plenitud de competencias del Ejecutivo. Llevamos más de tres meses, desde el 23-J, con el protagonismo político y mediático focalizado en personas que representan lo contrario de lo que impregnó el espíritu de dicha jornada.

Ha sido la Jura de la Constitución por parte de la Princesa de Asturias, de Girona y de Viana, como oportunamente recordó el Rey en su discurso en el Palacio Real previo al almuerzo oficial con una muy importante representación de todos los poderes del Estado. La piedra angular de la jornada fue la Constitución y la Monarquía parlamentaria, con el texto de la primera estrechamente unida a una Jura que representa la plena adhesión, respeto y compromiso con los principios y valores que contiene nuestra Carta Magna por parte de la sucesora a la Jefatura del Estado. La Constitución que ayer juró la Princesa Leonor considera la figura del Rey/Reina como «Jefe del Estado y símbolo de su unidad y permanencia», lo que en los tiempos que vivimos es una muy delicada responsabilidad.

Desde ayer Leonor, la Princesa de Asturias, es oficialmente la heredera al Trono y se ha cerrado un nuevo capítulo de la Historia de España y de la Monarquía parlamentaria, que comenzó cuando S.M. Felipe VI fue proclamado Rey ante las Cortes Generales el 19 de junio de 2014 tras la abdicación del Rey Juan Carlos hecha pública el precedente día 2.

La imagen contrapuesta a la importante jornada vivida ayer, la dio el mismo Gobierno en funciones, escenificando su naturaleza dual con sus ministras podemitas y el inexistente de Consumo –«en funciones» con carácter permanente–, ausentes de los actos para expresar su «republicanismo». Al igual que todos sus aliados parlamentarios de ERC, Junts, Bildu, PNV y BNG, lo que exime de más comentarios al respecto.

Habrá que preguntarles qué Constitución juran o prometen como requisito previo a acceder de manera formal al escaño. Y también a las ministras y ministros cuando hacen lo propio para acceder al cargo en el Palacio de la Zarzuela ante S.M. el Rey expresándole su lealtad.

En estos casos, es un muy grave incumplimiento a la promesa efectuada de guardar y respetar tanto la Constitución como al Jefe del Estado. Lamentable ausencia de sus SS.MM. D. Juan Carlos y Dña. Sofía. Era de justicia su presencia. Pese a ello, ¡feliz cumpleaños, Princesa!