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Santoral

¿Qué santo se celebra hoy, 24 de abril? Todo lo que debes saber del santoral de hoy

San Fidel de Sigmaringen, el abogado que cambió los tribunales por el hábito capuchino

¿Qué santo se celebra hoy, 24 de abril? Todo lo que debes saber del santoral de hoy Wikipedia

Cada 24 de abril, la Iglesia católica recuerda a San Fidel de Sigmaringen, un mártir del siglo XVII cuya vida es testimonio de fe, valentía y entrega absoluta a la predicación del Evangelio.

¿Quién fue San Fidel de Sigmaringen?

Nacido en 1577 en Sigmaringen, Alemania, bajo el nombre de Mark Rey, San Fidel tuvo una prometedora carrera como abogado antes de sentir el llamado religioso. Su profunda vocación lo llevó a abandonar la toga para ingresar en la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, adoptando el nombre de Fidel como símbolo de la fidelidad a Cristo que marcaría toda su vida.

Una vida de oración, penitencia y predicación

San Fidel se destacó por su vida austera, marcada por la oración constante, las vigilias y el ayuno. Pero su principal virtud fue su pasión por la predicación de la Palabra de Dios, lo que lo convirtió en una figura destacada dentro de los misioneros capuchinos.

En 1622, fue enviado como misionero a la región de Recia, actual Suiza, con el objetivo de reforzar la presencia católica en una zona sacudida por la Reforma protestante. Su misión consistía en confirmar a los fieles en la doctrina católica y, si era posible, reconvertir a quienes se habían alejado de ella.

El martirio en Sevis

Su fervor evangelizador no fue bien recibido por todos. En Sevis, un pequeño pueblo suizo, San Fidel fue interceptado por un grupo de calvinistas radicales. Tras negarse a renunciar a su fe y abandonar la misión, fue brutalmente asesinado mientras proclamaba el nombre de Cristo. Así selló con su sangre su fidelidad al Evangelio, convirtiéndose en mártir de la fe católica.

Fue canonizado en 1746 por el papa Benedicto XIV.

¿Por qué es importante recordar a San Fidel?

San Fidel de Sigmaringen representa el valor de la coherencia entre fe y vida. Su paso del mundo jurídico al religioso, y su decisión de predicar incluso a riesgo de su vida, lo convierten en un modelo de entrega total a los ideales cristianos. Su fiesta nos recuerda el precio de la libertad religiosa y la necesidad de vivir la fe con convicción, incluso en tiempos adversos.