Santoral

¿Qué santo se celebra hoy, 24 de julio? Esto es lo que debes saber del santoral de la Iglesia Católica

Hoy los cristianos conmemoran la vida de Santa Cristina de Bolsena un símbolo de fe y resistencia y de San Boris y San Gleb fueron príncipes, mártires y santos patronos de Rusia

Basilica di Santa Cristina, Bolsena, Lazio, Italia
Basilica di Santa Cristina, Bolsena, Lazio, ItaliaArchivo:Bolsena-chiesa santa cristina-altari.jpg - WikipediaLa Razón

El santoral católico es una lista que recoge los nombres de los santos y beatos reconocidos oficialmente por la Iglesia Católica y los asigna a una fecha específica en el calendario. En total, el santoral incluye alrededor de 7.000 personajes insignes. Los santos son hombres y mujeres que han dejado una huella en la historia del cristianismo, destacándose por su sacrificio y su vínculo especial con lo espiritual. Los beatos, por otro lado, están en camino hacia la canonización, es decir, en proceso de ser reconocidos como santos.

¿Qué santo se celebra hoy miércoles 24 de julio?

  • Santa Cristina de Bolsena
  • San Boris y San Gleb
  • San Balduíno de Rieti
  • San Charbel Makhluf
  • Santa Cunegunda de Hungría
  • San Declano de Ardmore
  • San Estercacio de Mérida
  • Santa Eufrasia de Tebaida
  • San Fantino el Viejo
  • San José Fernández
  • San Juan Boste
  • San Meneo de Licia
  • San Niceta de Licia
  • San Sarbelio Makhluf
  • Santa Sigolena de Albi
  • Beato Antonio Torriani
  • Beata Cristina Admirable
  • Beato Javier Bordás Piferrer
  • Beato José Lambton
  • Beato Juan de Tossignano Tavelli
  • Beata Luisa
  • Beata María de la Merced Prat
  • Beato Modestino de Jesús y de MaríaMazzarell

Santa Cristina de Bolsena: un símbolo de fe y resistencia en la Italia del siglo III

Santa Cristina de Bolsena
Santa Cristina de BolsenaCatholic.netLa Razón

En la ciudad italiana de Bolsena, durante el turbulento siglo III d.C., una joven mujer llamada Cristina se convirtió en un icono de fe y resistencia frente a la opresión romana. Venerada como Santa Cristina, su historia nos inspira a mantener firme nuestras convicciones y defender nuestros valores, incluso en las circunstancias más difíciles.

Nacimiento y juventud

Cristina nació en una familia noble de Bolsena, en el seno de una comunidad cristiana vibrante. Desde temprana edad, mostró una profunda devoción a Dios y un fuerte compromiso con su fe. Su belleza y bondad la convirtieron en una figura admirada en la ciudad.

Conversión al cristianismo

En una época en que el Imperio Romano perseguía a los cristianos, Cristina desafió las normas sociales y se convirtió al cristianismo. Su decisión la llevó a enfrentar la oposición de su padre, Urbano, un oficial romano que defendía las tradiciones paganas.

Encarcelamiento y martirio

Al negarse a renunciar a su fe, Cristina fue arrestada por orden de su propio padre. Sometida a crueles torturas y amenazas, Cristina permaneció firme en su convicción. Su fe inquebrantable la convirtió en un símbolo de resistencia para la comunidad cristiana.

Milagro de la Eucaristía

Según la tradición, durante su encarcelamiento, Cristina recibió la visita de un sacerdote que le llevó la Eucaristía. Al consumirla, experimentó una visión celestial que la fortaleció aún más en su fe. Este milagro, conocido como el Milagro de la Eucaristía de Bolsena, la convirtió en un símbolo aún más poderoso de la fe cristiana.

Muerte y legado

A pesar de los milagros y las súplicas, Cristina fue finalmente condenada a muerte. El 24 de julio del año 298 d.C., fue decapitada en las orillas del lago de Bolsena. Su muerte conmovió a la comunidad cristiana y la convirtió en una santa venerada en todo el mundo.

Veneración y significado

Santa Cristina de Bolsena es venerada como santa por la Iglesia Católica, la Iglesia Ortodoxa y la Iglesia Anglicana. Su festividad se celebra el 24 de julio. Su historia nos recuerda la importancia de mantener firme nuestra fe, incluso en las circunstancias más difíciles. Su ejemplo de valentía y convicción nos inspira a defender nuestras creencias y a luchar por nuestros valores.

San Boris y San Gleb: Príncipes, mártires y santos patronos de Rusia

San Boris y San Gleb
San Boris y San GlebObra de Dionisio el SabioLa Razón

En las tierras de la Rus de Kiev del siglo XI, dos príncipes llamados Boris y Gleb se convirtieron en símbolos de fe, fraternidad y sacrificio, venerados como santos patronos de Rusia. Su historia, marcada por la tragedia y la trascendencia, nos recuerda el poder de la fe, la importancia de la paz y el valor de perdonar a nuestros enemigos.

Nacimiento y linaje

Boris y Gleb eran hijos del Gran Príncipe Vladimir I, quien había unificado la Rus de Kiev y abrazado el cristianismo. Desde pequeños, recibieron una educación religiosa y fueron criados en los valores de la fe y la bondad.

Ascenso al poder y conflictos

A la muerte de Vladimir, sus hijos se vieron envueltos en una lucha por el poder. El hermano mayor, Sviatopolk, ambicionaba el trono y estaba dispuesto a eliminar a cualquier rival.

Asesinato de Boris y Gleb

Engañados por Sviatopolk, Boris y Gleb acudieron a su encuentro con la esperanza de resolver las diferencias de forma pacífica. Sin embargo, Sviatopolk los emboscó y ordenó su asesinato. Boris fue asesinado mientras rezaba, mientras que Gleb, al enterarse de la muerte de su hermano, se resistió al principio, pero finalmente aceptó su destino con resignación y perdón.

Veneración como santos

La muerte de Boris y Gleb conmovió profundamente al pueblo ruso. Se les consideró mártires por su fe y por haber perdonado a su hermano asesino. Fueron canonizados por la Iglesia Ortodoxa en 1072, convirtiéndose en los primeros santos de la Rus de Kiev.

Símbolos de fe y unidad

San Boris y San Gleb se convirtieron en símbolos de fe, fraternidad y sacrificio. Su historia nos recuerda la importancia de la paz y el perdón, incluso en las circunstancias más difíciles. Son venerados como santos patronos de Rusia y su legado sigue inspirando a creyentes de todo el mundo.