Informe

Por cada euro invertido en fármacos se ahorran entre 2 y 7 en otros gastos sanitarios

La Fundación Weber y Farmaindustria presentan un informe que muestra el valor clínico, económico y social de los nuevos medicamentos

El caso de las vacunas, como las de la Covid-19, son el ejemplo paradigmático de ahorro de costes indirectos, ya que son una de las intervenciones de salud pública más coste-efectivas
El caso de las vacunas, como las de la Covid-19, son el ejemplo paradigmático de ahorro de costes indirectos, ya que son una de las intervenciones de salud pública más coste-efectivasEmilio NaranjoEFE

El medicamento es uno de los bienes más valiosos que tienen las sociedades modernas. Es esencial para la salud y la calidad de vida de las personas, ya que cura enfermedades, las controla o reduce los síntomas y mejora las condiciones de vida de los pacientes. Pero los beneficios de la innovación biomédica se extienden más allá de la salud de los pacientes a los que se dirigen: los medicamentos benefician a la sociedad en su conjunto, porque potencian la eficacia y eficiencia del sistema sanitario, permiten una mayor productividad laboral y generan una importante contribución a la economía nacional.

Ésta es la principal conclusión del informe “El valor del medicamento desde una perspectiva social 2021″, realizado por la Fundación Weber, especialista en Economía de la Salud, con el apoyo de Farmaindustria y que ha sido presentado esta mañana y que es resultado de una exhaustiva revisión de la literatura científica desde 2018 –cuando se publicó la primera edición del documento-, que permite consolidar el mensaje de que el empleo de fármacos innovadores más eficaces que los anteriores puede redundar en un ahorro de costes, públicos y privados, sanitarios y no sanitarios y directos e indirectos, lo que permite liberar recursos para otros usos, mejorando la eficiencia del sistema sanitario, impulsando el crecimiento económico y redundando en múltiples beneficios desde una perspectiva social.

Costes indirectos

La presentación del informe ha corrido a cargo del presidente de la Fundación Weber, Álvaro Hidalgo, quien ha destacado que el efecto compensación de los nuevos medicamentos se ha producido en la mayor parte de países desarrollados, incluyendo España, y parece ser mayor a largo que a corto plazo. Distintos estudios estiman que “cada unidad adicional de gasto farmacéutico ha generado un ahorro neto de gasto directo sanitario entre 2,3 y 7,2 veces mayor. En general, los medicamentos son terapias coste-efectivas, por lo que se trataría de intervenciones eficientes en las que merece la pena invertir”.

Además, Hidalgo ha subrayado el caso de las vacunas como ejemplo paradigmático de ahorro de costes indirectos, ya que son una de las intervenciones de salud pública más coste-efectivas, “con unos beneficios que normalmente superan con creces a sus costes”. Por ejemplo, en España, por cada euro invertido en vacunación infantil se ahorran 22 euros en gastos directos e indirectos.