Vacaciones

Esta es la razón por la que nos deprimimos en verano

Aunque todos conocemos el trastorno afectivo estacional que se produce en invierno, existen personas que experimentan esta sensación en verano

Mujer en la playa
Mujer en la playaLa Razón

Cuando oímos hablar del trastorno afectivo estacional (TAE), tendemos a asociarlo con la depresión de invierno. TAE es un tipo de depresión que tiende a verse afectado por laépoca del año, la luz y el clima. Los síntomas generalmente ocurren durante el otoñoy/o principios del inviernoy mejoran durante la primavera y el verano. Los síntomas típicos de esta depresión incluyen: un estado de ánimo triste y bajo, sentirse desesperanzado, tener poca energía, un incremento del apetito y, en consecuencia, del peso corporal, aumento del sueño o hipersomnia, aislamiento y disminución del interés en actividades que solíamos disfrutar.

Lo que es digno de mención es que algunas personas experimentan el patrón opuesto, por el cual los síntomas de depresión comienzan en primavera o verano. Los síntomas pueden ser leves y luego progresan para volverse más severos. Aunque aún no se conoce la causa de la depresión durante el verano, los posibles factores que pueden contribuir a este estado incluyen el calor, la humedad y los días más largos. También se han observado factores estresantes adicionales que ocurren durante el verano, tales como:

  • Alteración de la rutina/horario/hábitos debido a vacaciones o ausencia de los niños en la escuela.
  • Cambio en los hábitos de sueño y alimentación debido a la interrupción de la rutina.
  • No poder participar en algunas vacaciones de verano o actividades al aire libre debido a limitaciones financieras.
  • Motivos de salud que impidan la participación en actividades de verano que puedan provocar aislamiento, tristeza y sensación de soledad.
  • Ansiedad o evitar participar en algunas actividades de verano al aire libre debido a la preocupación por la apariencia física.

Los síntomas típicos de la depresión de verano incluyen:

  • Estado de ánimo triste y bajo.
  • Ansiedad.
  • Agitación.
  • Reducción del apetito.
  • Pérdida de peso.
  • Dificultad para dormir e insomnio.

Si bien es normal experimentar fluctuaciones en el estado de ánimo y algunos cambios en el apetito y el sueño, la depresión de verano, sin embargo, es una afección más grave en la que los síntomas causan una angustia significativa y/o interfieren con nuestro funcionamiento diario, como el trabajo, la escuela o la vida personal. Además, si los síntomas se vuelven severos e intensos, pueden ocurrir propiciarse pensamientos suicidas y una interrupción significativa en nuestras actividades diarias.

¿Cómo lidiar con la depresión de verano?

Una mujer leyendo un libro mientras unos niños juegan en una fuente. (AP Photo/Manish Swarup)
Una mujer leyendo un libro mientras unos niños juegan en una fuente. (AP Photo/Manish Swarup)Manish SwarupAgencia AP

Se ha encontrado que varios tratamientos son útiles en la depresión de verano, como la terapia cognitiva conductual basada en la evidencia. Por lo tanto, es importante consultar a un profesional de la salud mental y no sufrir en silencio, en particular si los síntomas causan una angustia significativa o interfieren con su funcionamiento diario, se siente desesperanzado o tiene ideas suicidas, o consume más alcohol, nicotina, cafeína u otra sustancia para hacer frente a su angustia. El tratamiento temprano suele ser preferible para lograr un resultado positivo y no prolongar el sufrimiento, ya que en ocasiones, la depresión de verano puede no resolverse y convertirse en una depresión clínica más prolongada.

Además de los tratamientos, se podrían implementar otras estrategias para adaptarse al cambio de estación primavera/verano:

  • Evitar el retraimiento social y el aislamiento social; mantenerse activo, salir y hacer ejercicio físico regularmente; y mantener nuestras actividades diarias regulares.
  • Mantener una dieta saludable y un horario regular de comidas ayuda a nuestro sueño, estado de ánimo y nivel de energía.
  • Establecer un presupuesto financiero antes de la primavera para planificar mejor las actividades/proyectos para la primavera/verano.