Autodiagnóstico casero para detectar el glaucoma a tiempo

Es invisible, pero muy peligroso. El glaucoma se presenta como un problema de salud que provoca la pérdida paulatina de visión, de forma silenciosa, pero que puede llegar a provocar la ceguera. Las cifras de su evolución resultan desconcertantes, ya que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen más de 80 millones de personas en el mundo afectadas por esta enfermedad, dato que se disparará hasta los 112 millones de individuos en el año 2040 debido al incremento de la esperanza de vida.

Y nuestro país no resulta ajeno a esos números, pues las estadísticas confirman que más de un millón de españoles presenta glaucoma, aunque un elevadísimo porcentaje de afectados no sabe que lo padece, «a pesar de que se trata de la segunda causa de ceguera en países desarrollados», advierte el doctor Luis Emilio Pablo Julvez, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Miguel Servet de Zaragoza y presidente de la Sociedad Española de Glaucoma (SEG).

Falta de concienciación

Dada la necesidad de aumentar la concienciación sobre este problema y, con motivo de la Semana Mundial del Glaucoma, Madrid acogió del 16 al 18 de marzo el XVII Congreso de la SEG. «Falta mucha información y concienciación sobre el glaucoma, porque es una enfermedad que no avisa y que la ciudadanía no tiene en su radar, por lo que no se toman las medidas adecuadas para detectarla a tiempo», lamenta el doctor Emilio Pablo Julvez, quien destaca que «las nuevas formas de diagnóstico y tratamiento del glaucoma se traducen en innovadoras tecnologías, terapias y cirugías que, sin duda, mejoran el pronóstico y la calidad de vida de quien lo padece, pero el hándicap al que nos enfrentamos es esa falta de conciencia, porque si el paciente no acude a revisiones, solo se diagnosticará la enfermedad cuando ya está muy avanzada y toda esa innovación lograda pierde parte de su eficacia».

En este contexto, entre las novedades abordadas en Madrid, el presidente de la SEG hace hincapié en la importancia «del diagnóstico en casa, porque es una enfermedad que no da ningún síntoma hasta que no es muy tarde, por lo que lo más oportuno es realizar revisiones periódicas. Una de las opciones que se barajan actualmente es intentar llevar el diagnóstico a casa para lograr esa detección precoz. Esto ya se está iniciando en algunos países y puede ser el camino a seguir, gracias a diversos dispositivos que son capaces de medir la presión intraocular y controlar los signos de evolución de la enfermedad. Y en caso de pacientes ya diagnosticados, lo que se busca es monitorizar los signos de cambio en el glaucoma con un control más estrecho desde casa».

Para alcanzar el diagnóstico preciso, la innovación tecnológica es vital. «Hemos logrado una revolución espectacular, ya que ahora contamos con más armas, como la tomografía óptica de coherencia, que nos permite ver un corte de cómo están las capas del nervio óptico, que es la estructura que se daña cuando aparece el glaucoma», explica el doctor Emilio Pablo Julvez. Y una vez que se detecta el problema, el avance técnico también ha facilitado muy buenos resultados, de ahí que otro de los puntos tratados haya sido el impulso que está tomando la cirugía microincisional mediante válvulas. «Se trata de una intervención mínimamente invasiva en la que se coloca un dispositivo, similar a los stents cardiacos, que restaura la circulación y disminuye la presión del ojo de la forma más fisiológica posible. Resulta menos agresiva que las técnicas clásicas y es un gran avance por su alta tasa de éxito y la reducida probabilidad de complicaciones», explica el doctor Emilio Pablo Julvez. De cara al futuro, las novedades que se esperan en este campo son esperanzadoras, ya que «hay nuevos fármacos neuroprotectores capaces de proteger el nervio óptico. Todavía están en fase de investigación y desarrollo, pero pueden marcar el futuro», avanza el presidente de la SEG, quien destaca que, mientras tanto, «van apareciendo nuevas drogas cada vez más sencillas de tomar, lo que mejora la adherencia, y con menos efectos secundarios».

También en la infancia

A pesar de que el glaucoma es un problema que va muy ligado a la edad avanzada, también se da en menores. «Existen cuatro tipos de glaucoma infantil y pueden aparecer con varios grados desde el nacimiento o durante los primeros años de vida. En España, se estima que uno de cada 20.000 nacidos presenta glaucoma congénito primario, que es el más frecuente. Se trata de la primera causa de ceguera irreversible en los niños, aunque en el 80% de los casos, si se diagnostica a tiempo, se puede controlar con cirugía y con fármacos», confirma el doctor Julián García Feijóo, jefe de Servicio de Oftalmología del Hospital Clínico de Madrid y secretario general de la Sociedad Española de Oftalmología (SEO).

De cara al futuro, ambos especialistas coinciden en que la Medicina regenerativa y la terapia génica marcarán los próximos años. «La regeneración del nervio óptico y que se pueda reparar el daño producido es la gran esperanza que tenemos de aquí a 20 años, tanto en adultos como en niños, pero estamos todavía lejos de ello», augura el doctor García Feijóo.