El reconocido médico especialista en psiquiatría Enrique Rojas ha explicado, en una de las conferencias que organiza Mentes Expertas, cuando una persona alcanza la felicidad. "Una persona feliz es aquella que ha sabido diseñar un proyecto de vida, coherente y realista", concreta al auditorio. El experto en salud mental profundiza en los cuatro grandes argumentos que se arremolinan en torno al concepto de proyecto de vida: "son el amor, el trabajo, la cultura y la amistad".

A partir de estos cuatro elementos, Rojas concluye que "la felicidad consiste, siguiendo este curso de ideas, en un trabajo artesanal que hacemos cada uno de nosotros, según nuestras experiencias personales, con estos cuatro elementos que forman nuestra constelación geográfica". Finalmente, termina su intervención añadiendo un quinto elemento a los cuatro anteriores: "las aficiones, como telón de fondo". Pero, ¿cómo poner en marcha el proyecto de vida?

Enrique Rojas revela cómo tener un proyecto de vida feliz en seis pasos

El psiquiatra cuenta cuáles son las claves para tener un proyecto de vida pleno y que esté enfocado en ser feliz en el día a día. La felicidad no es una meta en sí, es más un camino que se puede recorrer cualquier día si sabes cómo hacerlo:

• Debe ser diseñado de forma personal. "Es uno el que traza su bosquejo y lleva ese sello", explica en su libro Comprende tus emociones.
• Tiene que ser coherente. Es decir, "que tenga en su interior el menor número posible de contradicciones. Debe ser armónico, equilibrado, con buena proporción entre sus elementos.
• Debe constar de la pentalogía básica: amor, trabajo, cultura, amistad y aficiones o hobbies. "Sabiendo que la voz cantante la llevan los dos primeros: amor y trabajo son las dos principales piezas para ser feliz", señala.
• Debe estar trazado con ilusión. "Lo digo de otra manera: la felicidad consiste en ilusión. Y eso significa fe en ello, anhelo, esperanza, entusiasmo. Vivir el presente empapado de un futuro sugerente que nos empuja a avanzar en esa dirección".
• Tiene que moverlo la voluntad. "La voluntad es la capacidad para ponerse uno objetivos concretos y luchar por irlos alcanzando. Y para que esta actúe y esté firme, fuerte, sólida, es fundamental la motivación, que mueve ese organigrama por el afán de llegar a esa meta. Ambas herramientas van muy entrelazadas: si hay una fuerte motivación, la voluntad está más robusta y supera las adversidades y dificultades con más firmeza", explica Enrique Rojas.
• Se ha de complementar con un ánimo positivo. "El estado de felicidad, en sus distintas versiones, se acompaña de un estado de ánimo positivo, lleno de matices según las circunstancias que se den en ese momento y, a su vez, hay un correlato bioquímico que consiste en un conjunto complejo de respuestas químicas y neuronales, que forman un patrón muy concreto".