Análisis

Una trombosis atípica y particular

Una enfermera prepara una dosis de la vacuna de Pfizer en Galicia
Una enfermera prepara una dosis de la vacuna de Pfizer en GaliciaMoncho FuentesAgencia EFE

-¿Qué son los trombos?

-Son coágulos patológicos que se forman en el interior de los vasos sanguíneos, ya sean venas o arterias.

-¿Por qué se producen?

-Por un conjunto de mecanismos que pueden afectar o bien a la integridad de la pared del vaso o bien porque haya un enlentecimiento del flujo sanguíneo, o por alguna alteración que contribuya a una especial propensión a la coagulación de la sangre.

-¿Son muy frecuentes?

-Respecto a las trombosis venosas, la incidencia en la población general es de uno o dos casos por cada 1.000 habitantes y año. En España se estima que al año se diagnostican entre 75.000 y 90.000 episodios de trombosis venosa. En el 50% aproximadamente de ellos no se identifica un factor precipitante. Los factores de riesgo clásicos son encamamiento, inmovilización, cirugías recientes, sufrir una enfermedad oncológica, el consumo de estrógenos o el embarazo.

-¿Qué relación hay entre los trombos y las vacunas de la covid?

-La vacuna de AZ, sobre todo, y ahora está pendiente ver qué pasa con Janssen, no se ha asociado con un incremento de esas trombosis convencionales a las que me refería, sino con un tipo muy concreto, atípico y particular que afecta preferentemente a territorios atípicos como los senos venosos cerebrales o las venas abdominales, y que además se acompañan de un descenso de plaquetas, hecho que particularmente ha llamado la atención. El mecanismo por el cual se producirían estas trombosis atípicas es una reacción inmunológica frente a las plaquetas, de forma que algunos individuos desarrollan autoanticuerpos que las activan, y las plaquetas activadas son un potente estímulo protrombótico.

-¿Existe algún factor de riesgo de sufrir uno al vacunarse?

-No se ha identificado ningún factor de riesgo que suponga una predisposición especial para el desarrollo de estas trombosis atípicas tras la vacuna de AZ. Es verdad que la mayoría de estos episodios se han descrito en mujeres y sobre todo jóvenes, por debajo de los 50 años, pero con el número de episodios que se han descrito hasta la fecha no es posible identificar de forma rotunda ningún factor de riesgo predisponente. Desde luego, dado que el mecanismo por el cual se producirían estos trombos nada tiene que ver con el de las trombosis convencionales, el hecho de tener una historia previa de trombosis venosa o el de estar tomando anticonceptivos o tener una trombofilia hereditaria no supone un mayor riesgo.

-¿Hay que tomar alguna medida de prevención antes o después de la vacunación para evitarlos?

-Ninguna, las mismas que la población general. Lo que hay que hacer es educar y advertir de que en las 2-3 primeras semanas tras la vacunación si una persona comienza a presentar una cefalea intensa que no responde a los analgésicos habituales o que se acompañe de otras alteraciones neurológicas, o dolor intenso abdominal, o inflamación de las piernas, o una dificultad respiratoria de inicio súbito acudir a urgencias.

-¿Qué opina de que se haya pausado la vacunación en EE UU con Janssen?

-Por lo que ha trascendido se han comunicado 6 casos de trombosis atípicas con trombocitopenia entre 7 millones de personas que la había recibido. Es muy prematuro hablar, pero esto iría a favor o induciría a sospechar que las vacunas que están vectorizadas con adenovirus podrían relacionarse con este efecto adverso muy infrecuente pero potencialmente grave.

Ramón Lecumberri, vocal de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y experto en trombosis