Tormentas, granizo y hasta inundaciones en el último fin de semana antes del verano

A estas alturas de junio, un plan de piscina y sol durante el fin de semana no suena descabellado. Sin embargo, este año la meteorología va a obligar a aplazar unos días el que probablemente sea el primer baño del año para muchos. La primavera se va a despedir con fuertes tormentas que afectarán especialmente al noroeste peninsular, según explica el director de meteorología de Meteored, José Antonio Maldonado.

Las fuertes precipitaciones de lluvia y granizode las últimas horas han causado inundaciones, caídas de árboles, filtraciones y destrozos en el campo en buena parte de España. Este jueves estará marcado por un incremento de la inestabilidad causado por un nuevo embolsamiento de aire frío que provocará tormentas en la mitad norte de la península y la vertiente mediterránea, donde la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado las alertas por lluvias y tormentas.

Los chubascos serán más intensos en Cataluña, Aragón, Navarra y País Vasco, donde la alerta es naranja. Desde Meteored no descartan nuevas inundaciones y granizo. También va a llover en el suroeste, pero serán precipitaciones más ligeras.

A la inestabilidad se le suma un descenso notable de las temperaturas que afectará, sobre todo, al interior peninsular. En cuanto a los vientos estos serán cambiantes y racheados en las zonas afectadas por las lluvias, según la previsión de Meteored.

La situación mejorará el viernes, aunque la Amet mantiene el aviso amarillo por lluvias en el litoral cántabro, el interior de Galicia y Navarra. Las tormentas serán de gran intensidad en todo el noroeste de la península y no se descarta la posibilidad de que las precipitaciones sean en forma de granizo. Además, las tormentas irán acompañadas de fuertes rachas de viento.

Esta situación se mantendrá durante el fin de semana. El sábado, las tormentas serán más intensas en Cantabria, País Vasco, Navarra y La Rioja, mientras que en el resto de la península serán más débiles. El domingo, las lluvias estarán más presentes en Galicia, Asturias y el noroeste de Castilla y León, pero seguirán siendo de carácter débil.

Esta recta final de la primavera marcada por las precipitaciones no representa cómo ha sido la estación en términos generales. La de este año ha sido la cuarta primavera más seca de la serie histórica, que tiene datos desde 1961, solo por detrás de las de 1970, 1995 y 2005. En primavera se recogieron 114,5 litros por metro cuadrado en la España peninsular, lo que representa un 33% menos de la media. Marzo fue muy seco (un 63% menos), abril resultó normal (-1%) y mayo, otra vez muy seco (-43%), según la Aemet.