Medidas de prevención

La UE se aísla del sur de África por Ómicron

Una mujer en Bélgica con síntomas de coronavirus tras un viaje a Egipto con escala en Turquía es el primer caso confirmado en Europa de un paciente contagiado

Los países de la Unión Europea acordaron ayer suspender los vuelos a siete países del sur de África debido a la nueva variante sudafricana del covid-19, denominada Ómicron por la OMS. Se trata de Suráfrica, Lesotho, Botswana, Zimbabwe, Mozambique, Namibia y Eswatini. Los Veintisiete acordaron también que los residentes europeos que provengan de esos países y que sí tienen derecho a entrar en la UE se sometan a test y un periodo de cuarentena, según informó la presidencia eslovena de la UE.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, había propuesto ayer por la mañana a los países del club comunitario la suspensión de todas las conexiones áreas y la activación del conocido «freno de emergencia» que tiene como objetivo poder responder a las amenazas urgentes y e imponer nuevas restricciones de manera rápida, para que el virus no se propague en el club comunitario.

La presidenta de la Comisión señaló que «sabemos que las mutaciones pueden suponer una emergencia y extenderse incluso en variaciones más preocupantes del virus que pueden extenderse alrededor del mundo en pocos meses». La directora del Centro para la prevención y el Control de Enfermedades, Andrea Ammon, ya había alertado en una entrevista publicada el pasado Domingo de la posibilidad de una nueva variante y urgió a las autoridades nacionales a aumentar la secuenciación del virus.

Poco antes de que Von der Leyen compareciera ante los medios de comunicación, la prensa belga había informado del primer caso en suelo europeo. Un noticia que fue posteriormente confirmada por las autoridades sanitarias. Se trata de una mujer que había viajado a Egipto y Turquía, sin vacunar, y que dio un resultado positivo en un test efectuado el pasado día 22. Empezó a desarrollar síntomas 11 días después de haber concluido este viaje a Egipto. La paciente presenta una alta carga vírica y la sospecha es que esta nueva variante resulta más transmisible que las cepas anteriores, pero aún se desconoce si puede esquivar la protección inmunitaria que otorgan vacunas desarrolladas hasta el momento. Se espera que el laboratorio BioNTech, aliado con Pfizer en el desarrollo de la vacuna, tenga resultados preliminares sobre la eficacia de su antídoto, frente a esta nueva cepa, dentro de dos semanas. Además, la compañía cree que podrá desarrollar una nueva versión de su vacuna en unos cien días si se demuestra que su antídoto no es lo suficientemente eficaz contra esta nueva variante.

Antes de conocerse la noticia, las autoridades belgas se habían reunido en un nuevo comité de concertación para dictar nuevas medidas ante la explosión de casos en el país. Uno de los grandes perjudicados será el sector de la noche, ya que las discotecas quedarán clausuradas y los bares deberán cerrar sus puertas a las once de la noche. Se mantiene la obligación del teletrabajo obligatorio cuatro días a la semana.

Vacunación, la clave

La presidenta de la Comisión Europea volvió a recalcar la importancia de la vacunación ya que en la UE la tasa media no llega al 70%, lo que hace que se avecinen unos meses de diciembre y enero en algo riesgo.

Austria incluso ha introducido la obligación por ley para que todos los ciudadanos se inmunicen y ha sido el primer país europeo en dictar un nuevo confinamiento de la población.

Bruselas quiere que las personas en posesión del certificado europeo de vacunación puedan seguir viajando dentro del territorio comunitario sin cortapisas, pero este jueves propuso que este documento caduque a los nueve meses de haber recibido las dos dosis, como modo de promover el tercer pinchazo de refuerzo. Von der Leyen, también recordó ayer que los contratos firmados con los laboratorios para 2022 y 2023 también prevén la adaptación a nuevas cepas más virulentas.

El Gobierno de Estados Unidos avisó este viernes de que a partir del próximo lunes pondrá restricciones a los viajeros procedentes de Sudáfrica y otros siete países del Sur de África.

En un comunicado, la Casa Blanca anunció que las restricciones incluirán, además de Suráfrica, a Botswana, Zimbabwe, Namibia, Lesotho, Eswatini, Mozambique y Malawi.

En el principal país afectado, Suráfrica, el ministro de Salud, Joe Phaahla, recalcó que ve «injustificada, contraproducente y draconiana» la reacción aplicada al sur de África «dada la escasa información científica todavía disponible».

Afirmó que aunque el miedo y la preocupación son «esperables» en esta clase de situaciones, «parte de la reacción es injustificada. Y me refiero aquí específicamente a la reacción de los países en Europa y el Reino Unido».