¿Por qué a los gatos les gusta dormir encima de sus dueños?

Los gatos son más independientes que otras mascotas, pero eso no significa que no necesite nuestra atención ni nuestro cariño. Cada animal es un ser único y habrá algunos que nos reclamen constantemente para que les hagamos arrumacos y otros que prefieran tener sus momentos de soledad y tranquilidad. Pero a la mayoría les encanta acurrucarse y quedarse dormido a los pies de la cama de sus dueños cada noche. Los gatos duermen de 12 a 20 horas al día y en muchas ocasiones buscará a su dueño para hacerlo sobre él. Esto tiene explicaciones fisiológicas y psicológicas.

Buscan el calor corporal

Somos una importante fuente de calor. El frío y los gatos no son buenos compañeros y por ello es habitual verles que en épocas de frío se sitúan cerca de un radiador o de una ventana donde da el sol para acurrucarse y dormirse. Pero claro, el dueño también desprende calor y ¡cómo va a desaprovecharla si además se puede llevar también unas caricias!

Los gatos suelen acurrucarse en el cuello, sobre la cabeza o el estómago si necesitan el calor corporal para poder dormir de una manera cómoda.

De hecho, un ejemplo de la mala relación de los gatos con el frío se produce en los meses más fríos del año, época en la que muchos gatos callejeros se refugian dentro de los coches, en las zonas cercanas al motor, para tratar de aprovecharse del calor que desprende el vehículo y poder soportar mejor las bajas temperaturas.

Necesidad de sentirse seguro

Pero además de recibir calor, si también pueden tener la sensación de sentirse tranquilos y a salvo, pues mejor que mejor. Los gatos, a pesar de estar en un ambiente seguro y conocido como puede ser una casa, siempre están alerta ante un posible peligro. Es algo instintivo, innato en cada felino. Por ello, cuando deciden echarse a dormir un rato no lo harán en cualquier sitio. Buscarán siempre un lugar en el que se encuentren seguros. Por ello, en muchas ocasiones buscan a sus dueños que, además de confort, les aportan tranquilidad.

Instinto protector

Una tercera razón por la que un gato decida dormir encima de su dueño es su instinto protector. Como felino, no sólo está en alerta de manera constante sino que también quiere que los suyos estén protegidos. Es un sentimiento más espiritual que físico, como ocurre con los perros. Los gatos son muy independientes y pueden percibir las energías negativas y transformarlas en positivas, incluso regular las energías de sus dueños. Por eso no es de extrañar que cuando un gato detecte que su amo está estresado o angustiado decida protegerle de varias formas: mostrándole su cariño, jugando, lamiéndole como si fuera un miembro más de su camada o dormir sobre él para aportarle paz y eliminar las malas energías.

Mostrar sus sentimientos

En cuarto lugar, es una cuestión meramente afectiva. el gato quiere expresar su cariño. A pesar de que son seres muy independientes, también necesitan expresarse y transmitir que quiere estar cerca de nosotros. Un ejemplo claro de esto es cuando el gato pasa muchas horas solo en casa. Cuando llega el amo, el animal solo querrá mostrarle su amor jugando, lamiéndole y reclamando su atención.

Los olores

Por último, el aroma nos hace irresistibles. Los gatos buscan nuestro olor porque en nuestra compañía se sienten seguros, confortables y queridos. Esto no quita que los gatos prefieran el olor de las mujeres, que tienen olores mucho más atractivos y sugerentes para los gatos, que tienen una agudeza olfativa cuatro veces superior a la de los humanos, por lo que para ellos los olores son muy importantes.