Los circuitos sensoriales del cerebro pueden influir en patologías como el autismo, la epilepsia o la dislexia

¿Cómo es capaz el cerebro de adaptarse a la pérdida sensorial? ¿Cómo condicionan los recuerdos nuestra percepción de la realidad? A estas y otras muchas cuestiones acerca del sistema nervioso y los mecanismos que regulan el control de las reacciones nerviosas y del comportamiento del cerebro han tratado de dar respuesta las neurociencias, que pese a ser un campo de investigación relativamente reciente, en los últimos años ha experimentado importantes avances con resultados destacados.

Ahora, por ejemplo, sabemos que el desarrollo del cerebro está condicionado por la información sensorial que recibimos del exterior. Es decir, la vista, el oído y el tacto captan estímulos que están asociados a la formación y la plasticidad de las conexiones neuronales, de manera que cuando se produce una pérdida de alguno de estos sentidos o de los estímulos sensoriales, las neuronas y circuitos neuronales del tálamo y la corteza cerebral se reducen significativamente. Y estos progresos realizados en el contexto de las neurociencias, especialmente en la compresión de dos elementos claves en el cerebro como son la percepción y la memoria, pueden aportar información muy relevante en lo que se refiere al conocimiento y tratamiento de patologías cerebrales.

Precisamente, sobre ello, sobre la importancia de entender la memoria y la percepción a la hora de abordar las enfermedades cerebrales versa el nuevo Debate CaixaResearch, que se celebra mañana martes. El evento, organizado por la Fundación “la Caixa”, cuenta con la participación de la investigadora Guillermina López-Bendito, profesora de investigación del CSIC e investigadora principal del Grupo de Desarrollo, Plasticidad y Reprogramación de los Circuitos Sensoriales del Instituto de Neurociencias de Alicante, que acaba de recibir una ayuda de excelencia Advanced Grant del Consejo Europeo de Investigación para estudiar cómo se forman los circuitos sensoriales en un cerebro en desarrollo, puesto que se considera la posibilidad de que ciertos problemas surgidos en su formación pueden intervenir en patologías como el autismo, la epilepsia o la dislexia.

Además, López-Bendito está llevando a cabo, también, una investigación acerca del diseño de estrategias para generar neuronas con actividad sensorial a partir de células nerviosas de soporte para recuperar circuitos neuronales dañados, algo para lo que cuenta con una ayuda CaixaResearch de Investigación en Salud.

Sobre este trabajo y los progresos en este campo hablará la investigadora durante el debate, en el que también participa Jose Dalmau, profesor ICREA y jefe del equipo de investigación de Neuroinmunología Clínica y Experimental de IDIBAPS-Hospital Clínic-Universidad de Barcelona, quien podrá ofrecer nuevos datos acerca de la relación entre los recuerdos y nuestra percepción de la realidad. Y es que el investigador está estudiando, con el apoyo de la Convocatoria CaixaResearch de Investigación en Salud, las correlaciones de la actividad neuronal de determinadas estructuras cerebrales con los déficits cognitivos de pacientes con encefalitis por anticuerpos LGI1 mediante técnicas de neuroimagen y electrofisiología.

En esta línea, Dalmau se referirá en el debate a cómo el estudio de algunas patologías neurológicas puede ser útil a la hora de entender los mecanismos de formación, consolidación y recuperación de la memoria, como sucede con las encefalitis autoinmune, que se desarrollan cuando el sistema inmunitario ataca proteínas o receptores del sistema nervioso y, durante su progresión, provocan una inflamación del cerebro que, a menudo, deriva en una pérdida de diversos tipos de memoria, espacialmente la de corto plazo.

Así pues, el investigador repasará la evidencia acerca de los que sucede en el cerebro en relación a estas enfermedades y aludirá a estudios que se están desarrollando actualmente en esta línea.