Incendios

Orografía complicada y olas de calor: las dificultades de apagar un incendio forestal

Los más preocupantes están ahora en Valencia y Castilla La Mancha

HUMANES (GUADALAJARA), 26/07/2022.- Varios bomberos en la zona afectada por el incendio forestal originado ayer en Humanes (Guadalajara), que ha calcinado 2.500 hectáreas y ha motivado el desalojo de unas mil personas. EFE/ Nacho Izquierdo
HUMANES (GUADALAJARA), 26/07/2022.- Varios bomberos en la zona afectada por el incendio forestal originado ayer en Humanes (Guadalajara), que ha calcinado 2.500 hectáreas y ha motivado el desalojo de unas mil personas. EFE/ Nacho IzquierdoNacho IzquierdoAgencia EFE

Ya son muchos días seguidos de altas temperaturas. Ese es uno de los principales desafíos de las brigadas forestales que estos días se dedican a apagar las llamas en la treintena de incendios forestales que siguen activos en nuestro país: la sequía extrema y la gran masa forestal en muchas zonas, unido a una orografía muy abrupta del terreno, complican o imposibilitan, en muchas ocasiones, el trabajo de los profesionales de extinción que actúan en tierra.

Los incendios más importantes forestales continuaban ayer en siete comunidades autónomas (Andalucía, Galicia, Navarra, Comunidad Valenciana, Castilla La-Mancha, Castilla y León y Canarias), y, aunque las altas temperaturas remitían, el riesgo extremo de fuego continuaba activado. Los más virulentos, el reactivado de Zamora y Burgos y el de Tenerife pasaron a la fase de estabilización a última hora del lunes, pero ayer se declararon nuevos fuegos en Castilla La-Mancha (en Guadalajara, cuyo humo llegaba a Madrid y Ciudad Real), en Huelva y en Valencia.

En la comunidad manchega, afectó a 6.000 hectáreas y cerca de un millar de vecinos tuvieron que ser desalojados. En Santo Domingo de Silos es donde ha tenido lugar uno de los fuegos más devastadores, que ha calcinado más de 3.500 hectáreas, aunque ya se encuentra sin llama.

En cuanto a los seis de Castilla La Mancha, hay casi 6.000 hectáreas afectadas. El de Malagón (Ciudad Real) ha dañado unas 2.500 hectáreas y el de Humanes (Guadalajara), otras 2.500, lo que ha motivado el desalojo de unas 1.000 personas. En Castilla y León, por su parte, siguen activos los de Burgos, Ávila y Zamora. El presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco sostuvo que la mano del hombre (de forma intencionada o imprudente, así como la «anomalía climática», son algunas de las causas de los incendios.

Los de Ávila y Zamora fueron intencionados, según los indicios, y desde la Junta de Castilla y León se ha apelado a la colaboración ciudadana y de la Guardia Civil para detener a los que los han provocado, prendiendo fuego «de manera tan terrible y tan terrorista».

En Vegalatrave (Zamora), muy cerca del incendio registrado la pasada semana en Losacio, las llamas han sido sofocadas, lo que ha permitido también el retorno de vecinos y veraneantes desalojados en seis municipios de la comarca Tierra de Alba.

El incendio declarado en la tarde del lunes en una zona boscosa de la localidad valenciana de Calles, en la comarca de Los Serranos, ha calcinado ya unas 230 hectáreas, según informaron ayer a fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat. Desde primera hora de la mañana estuvieron actuando seis medios aéreos de la Generalitat, cuatro del Ministerio de Transición Ecológica y dos helicópteros de la UME.

Además, la orografía del terreno, igual que ocurre en el incendio de El Bierzo (León) complicaba sobremanera la extinción por tierra, por lo que quedaba casi todo hipotecado a los medios aéreos. Sin embargo en un incendio forestal que acumula mucha energía por la cantidad de masa forestal que tiene de combustible, al tirar agua desde arriba los medios aéreos a veces se evapora antes de llegar a la llama por lo que son complicados de apagar.

Y, de forma paralela a las tareas de extinción, los investigadores van dando respuesta al origen de algunas llamas. La Guardia Civil detuvo ayer a un hombre de 47 años como presunto autor del incendio forestal de nivel 2 en Sabinares del Arlanza (Burgos) que se habría originado por una «negligencia grave» al hacer uso de una cosechadora, «todo apunta, fuera del horario permitido», precisan desde el Instituto armado.

Este incendio comenzó la tarde del domingo y ha afectado, de momento, a más de 3.000 hectáreas de monte, arbolado y cereal de la comarca burgalesa de Sabinares del Arlanza, además de daños materiales en viviendas de varias localidades. Además, las llamas provocaron la evacuación y desalojo de 900 personas de Santibáñez del Val, Santo Domingo de Silos, Villanueva de Carazo, Carazo y Hacinas.