Víctimas sin ayudas al tocar Belarra una nueva ley social

Tras la polémica generada por la llamada Ley del «Solo sí es sí», que ha dejado a decenas de agresores sexuales en la calle o con rebajas de condena al modificar las horquillas de las penas mínimas y la tipificación de las diferentes modalidades de los delitos contra la libertad sexual, los juristas están ahora en tensión por la posible nueva modificación que quiere llevar a la práctica Podemos.

Y es que la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha manifestado su intención de modificar la Ley General de Subvenciones para «sacar» las consideradas ayudas de emergencia como una excepción a la norma.

Según avanzó «Abc», para «agilizar» la respuesta pública a situaciones de vulnerabilidad o «emergencia social», las prestaciones gestionadas por los servicios sociales destinadas a personas físicas quedarían excluidas del ámbito de la aplicación de la normativa general de subvenciones.

Hasta ahora, para acceder a este tipo de ayudas (de la norma general de subvenciones) había que estar al corriente de los pagos con Hacienda. De hecho, la ley dice literalmente que no podrán obtener condición de beneficiario las personas que «no estén al corriente en el cumplimiento de las obligaciones tributarias o frente a la Seguridad Social impuestas en las disposiciones vigentes, en la forma que se determine reglamentariamente».

Así, al tener que modificar ahora la ley para excluir de la norma a las personas que se encuentren en situación calificada de «emergencia o urgencia social», Belarra podría perjudicar a las mujeres que actualmente perciben ayudas por ser víctimas de violencia sexual.

Y es que al tener que tocar la ley, los legisladores tendrían que añadir ahora un nuevo apartado para exceptuar a las personas en situación de emergencia social. Sin embargo, el apartado que deberían añadir para dejar atada la nueva excepción, ya existiría.

El apartado «i» de la Ley de Subvenciones establece que no tendrán carácter de subvención «las ayudas económicas a las víctimas de violencias sexuales concedidas según lo establecido en el artículo 41 de la Ley Orgánica de garantía integral de la libertad sexual y en la Ley 35/1995 de 11 de diciembre de ayudas y asistencia a las víctimas de delitos violentos y contra la libertad sexual».

Los expertos aseguran que, en caso de que este error no fuera subsanado, las víctimas de violencia de género comenzarían a regirse bajo la Ley General de Subvenciones.

Sin embargo, aunque este error podría ser sencillo de corregir («añadir» sería más fácil que si hubiesen decidido «sustituir» un párrafo por otro) lo importante es que las víctimas finalmente no queden excluidas por «tocar» normal sin consulta previa a juristas, como ya ocurrió con la polémica ley del «Solo sí es sí».

Desde el ministerio de Belarra también quieren crear un «catálogo común» de servicios sociales básicos unificados en todo el territorio nacional, al margen de que las competencias en la materia estén transferidas a las comunidades autónomas.