Vivienda

Antoni Daimiel confiesa los problemas vividos tras permitir a un okupa seguir en su casa: "Recibí una amenaza de muerte"

El reconocido comentarista deportivo reveló en COPE cómo ocurrió todo y el motivo por el que permite seguir en su vivienda a esta persona, a la que no quiere llamar okupa: "No lo entiende nadie"

Guille Giménez y Antoni Daimiel
Guille Giménez y Antoni DaimielMovistar

Al pensar en la NBA y las retransmisiones deportivas a todos nos viene un nombre, Antoni Daimiel. El periodista ha formado dos de las parejas más emblemáticas de la televisión, primer junto al inolvidable Andrés Montes y posteriormente, con Guille Giménez, con el que sigue compartiendo las noches en el plató de Movistar. Es uno de los grandes expertos de baloncesto de nuestro país, comentando también en fechas marcadas en el calendario europeo y nacional.

Compagina la televisión con apariciones en la radio, especialmente deportiva. Este miércoles estuvo hablando con Alberto Herrera en COPE y charló sobre un tema desconocido hasta el momento por el público general. El periodista deportivo tiene dos casas y según reveló su entrevistador y posteriormente explicó él, en una de ellas hay viviendo una persona sin pagar. Este tipo de personas son conocidos como okupas, inquiokupas en este caso concreto, pero cómo reveló Herrera, a Antoni Daimiel no le gusta que se utilice este término.

Antoni Damiel explica cómo entró la persona a vivir en su segunda casa

El reconocido periodista explicó paso a paso cómo sucedió todo durante la entrevista en el programa de radio: "Lo que sucedió fue que un amigo de mi hermano nos dijo que tenía una inmobiliaria. Nos dijo que si comprábamos un inmueble y lo alquilábamos, sería una buena inversión". Tomaron la decisión de hacerlo, según contó en COPE: "Había una familia, por lo supe, que dejó de pagar". Antoni confesó que una llamada le hizo pensar: "Unas navidades me llamó la presidenta de la comunidad y le dije, ¿qué tal los vecinos? La respuesta fue que muy bien, son personas encantadoras en la comunidad y eso me enterneció".

"Años atrás había tenido niños apadrinados con ONGs, dije, si de momento no lo necesito, lo tengo casi como un acto de solidaridad", explicó. Sin embargo, esto le ha traído problemas en redes sociales: " Me ha generado bastanes problemas, hasta una amenaza de muerte. Yo creo que la gente no lo entendió bien", añadió. Alberto Herrera también le preguntó sobre cómo vivió su entorno más cercano esta situación, ante lo que respondió de manera totalmente sincera: "Esto no lo entiende nadie al nivel que lo entiendo yo, pero de momento sigue. Yo sigo con mi acto solidario", concluyó de forma distendida.

La diferencia entre inquiokupación, allanamiento de morada y usurpación de vivienda

Hay varios términos que se confunden al hablar de ocupación ilegal de viviendas.Los inquiokupas son aquellos que, tras pagar algún mes el alquiler, dejan de hacerloy permanecen en el interior de la vivienda sin pagar nada hasta que un juez ordena su desalojo pese a que el propietario les ha pedido que la abandonen, respetando el contrato de alquiler. El allanamiento de morada y la usurpación de vivienda tiene lugar cuando no hay ningún contrato previo de por medio.

El allanamiento de morada ocurre en la primera o segunda vivienda y es un crimen grave recogido en el artículo 202 del Código Penal mientras que la usurpación de vivienda se refiere a aquellas propiedades que no son ni primera ni segunda vivienda y está recogido en el artículo 245 del Código Penal. No es un delito tan grave, ya que no se considera un ataque a la inviolabilidad del domicilio.