España sigue siendo uno de los destinos favoritos para quienes deciden rehacer su vida fuera de su país de origen. Sol, gastronomía, sanidad pública y un estilo de vida más relajado figuran entre los motivos más citados. Pero hay otro aspecto que muchos extranjeros valoran especialmente: la sensación de seguridad. Y eso es precisamente lo que ha querido destacar Carley Chaplin, una británica que lleva más de un año viviendo en Barcelona.

A través de sus redes sociales, Carley comparte aspectos de su vida cotidiana en España, desde costumbres culturales hasta anécdotas familiares. En uno de sus vídeos más recientes, ha narrado una situación que le hizo reflexionar, una vez más, sobre la eficacia y profesionalidad de la Policía española, especialmente en momentos de incertidumbre.

La experiencia de Carley con la Policía española

Todo comenzó a las cuatro de la madrugada, cuando Carley y su familia se disponían a salir hacia el aeropuerto para viajar al Reino Unido durante Semana Santa. Al abrir la puerta de su vivienda, se toparon con una escena inusual: una mujer desconocida estaba llamando insistentemente al timbre de uno de los apartamentos de enfrente.

“El hecho de encontrar a alguien actuando de forma tan extraña a esas horas ya nos hizo sentir incómodos. Además, nos íbamos de casa y siempre tienes esa preocupación de dejarla vacía”, cuenta Carley en su vídeo, en el que habla en su idioma directamente a la cámara con tono cercano pero firme.

La familia decidió entonces contactar con la Policía Local, y lo que sucedió a continuación fue lo que realmente sorprendió a la británica. “En apenas dos minutos, los agentes ya estaban allí hablando con la mujer. La conocían. Todo fue muy rápido, tranquilo y profesional”, relata.

No era la primera vez que Carley tenía contacto indirecto con las fuerzas de seguridad en España. En su vídeo menciona que han tenido “unas cuantas experiencias” similares y que, en todas ellas, la actuación policial ha sido “rápida y calmada”, lo que refuerza su confianza en el sistema. “Es una de las razones por las que nos sentimos tan seguros viviendo aquí”, concluye.

Su reflexión no es aislada. Según el Índice de Paz Global 2023, España se sitúa entre los 30 países más seguros del mundo, y por delante de muchos países del entorno europeo, incluidos Reino Unido, Francia o Bélgica. Además, los datos del Ministerio del Interior confirman una tendencia estable en los niveles de criminalidad, con un descenso en delitos violentos y una mayor presencia policial en zonas urbanas.

Más allá de los números, lo que transmite esta británica es una sensación de tranquilidad emocional: la certeza de que, ante una situación potencialmente desconcertante, hay un sistema que responde. Y lo hace sin estridencias ni excesos, con eficacia y respeto: “Cuando vives en un país diferente al tuyo, estas cosas cuentan. Saber que puedes confiar en cómo gestiona las situaciones la Policía marca una gran diferencia”, concluye Carley.