Moda

El "butterfly cut" y los rubios mantequilla: los cortes de pelo tendencia de esta primavera

El prestigioso salón de peluquería Cheska nos descubre los looks que marcarán la temporada y desmonta algunos mitos capilares: "El pelo hay que lavarlo tantas veces como se necesite"

El "butterfly cut" y los rubios mantequilla: los cortes de pelo tendencia de esta primavera
El "butterfly cut" y los rubios mantequilla: los cortes de pelo tendencia de esta primaveraSalón Cheska

A María no le hace falta hacer un estudio muy concienzudo de tus facciones para saber qué corte de pelo es el que mejor te encaja. Lo hace quizás de forma inconsciente, en apenas unos segundos, por deformación profesional, aunque luego “afine el tiro” ya puestos manos a la obra en función de cómo son tus fibras capilares. Así puede hacer un buen diagnóstico para saber qué gama de colores admite tu cabello y cuál será el resultado final sin peinar. Lleva tantos kilómetros a sus espaldas que lo ve cristalino casi desde el minuto uno. Puede que sea esa intuición innata mezclada con muchas horas de trabajo y, sobre todo, esa pasión por su profesión, la que le ha llevado a querer seguir siempre aprendiendo.

Ese amor por lo que hace y su ansia de perseguir siempre la vanguardia le ha colocado en el lugar donde está ahora: dictando las tendencias de cada temporada de la mano de los diseñadores más prestigiosos. Pero María Baras -directora creativa del mítico salón de peluquería Cheska, situado en pleno corazón del barrio de Salamanca de Madrid-, se quita méritos para honrar a sus padres, los fundadores de la que se convertiría en la archiconocida “peluquería de las famosas” y que cuenta entre sus fieles clientas a gente como Nieves Álvarez o Sara Carbonero.

Fueron Jesús y Cheska quienes crearon el negocio en los años 70 en el mismo lugar donde ha permanecido 54 años. “Hemos tenido otros locales pero nos dimos cuenta de que lo que nos gusta es estar aquí todas juntitas. Al final, tener varios locales te aleja de tus clientas y acabas siendo gestora y a mi la felicidad me la da cortar el pelo a mis clientas y seguir sus cambios de look. Y a mi madre lo mismo, ¡es que cada vez me parezco más a ella”, confiesa entre risas. Así, fue Cheska madre quien abrió el camino. Aprendió el oficio con 14 años y, con la ayuda de su marido, que le asesoró en la parte empresarial, decidieron montar negocio propio. Ella todavía sigue yendo a su peluquería a cortar el pelo a sus clientas: “Es como el escultor que disfruta creando su obra, es que es feliz viniendo”, resume su hija que, después de estudiar Historia del Arte y, lejos de acomodarse en el más que consolidado negocio de sus padres, decidió romper el cordón umbilical, formarse en Londres y, después empaparse unos años en la prestigiosa Vidal Sassoon Academy, regresó a Madrid con aires renovados para darle un toque más actual a la peluquería.

El laboratorio del color

Todo este bagaje le ha llevado a Baras a dictar en gran parte la moda y marcar, cada temporada, las nuevas tendencias en corte y color ya que compagina el salón con multitud de producciones de moda y publicidad para seguir desarrollando su faceta más artística y creativa. Además, si por algo son conocidas en Cheska es por arreglar prácticamente cualquier “desaguisado de color” con el que llegan muchas clientas.

El salón de Velázquez y su prestigioso “laboratorio del color” -la trastienda y el corazón de la peluquería con miles de tubitos de todos los tonos imaginables-, se ha convertido en algo así como el agua en el desierto para los casos realmente difíciles. “Yo no sé cómo empezó a correrse la voz pero ¡madre mía, sí! Es que hasta lo pone en Google ¡y yo no sé cómo borrarnos de eso!”, dice entre risas porque, admite: “es un marrón que te mueres”. Y es que además de arreglar “casos perdidos”, también realizan un trabajo “muy de explicar, muy psicológico”, como reconoce la propia Baras, para que, por encima del color deseado, prime siempre cuidar la salud del cabello.

Pero María, que sigue yendo a la peluquería a cortar el pelo (con lo que más sigue disfrutando), hace un inciso en la vorágine de su agenda diaria para mostrarnos lo que se va a llevar esta temporada. Porque, aunque parezca increíble: no, no está todo ya inventado. Igual que ocurre en la moda textil, en el cabello todo se reinventa y todo vuelve transformado”, resume Baras. Así, igual que dejamos atrás los pitillo para volver a los pantalones de campana, hemos dejado atrás esas melenas tan enteras que se han llevado tanto estos años para regresar al mundo capas.

“Hay una evolución. Ya no te digo solo todo ochentero o noventero pero sí que todo vuelve reinventado y cambia porque son otros tonos; antes era más decolorado y ahora es todo más natural y orgánico. Pero la moda es cíclica”.

Y este año, sí, no solo vuelven las capas. También el pelo cobrizo, las french bangs con aires franceses, capas invisibles. Los rubios mantequilla (uno de los más demandados ya que en Cheska son famosas por los rubios). También el “chin bob” a la altura de la barbilla, el butterfly cut o “corte mariposa”, con capas más ondeadas y largas, pero más allá de la vanguardia de las pasarelas, en Cheska adaptan las tendencias a la “vida real”: es decir, al casual o “street style” de sus clientas de vida urbanita y lo que mejor le va a sentar a cada una. Porque, por mucho que alguien llegue con una foto, María y su equipo (una veintena de personas a quienes enseñan la técnica propia del icónico salón) siempre le van a aconsejar “adaptarlo” e “integrarlo” a ella: a su tipo de pelo, la forma de su cabeza etc.

Así, estos estilos serán las tendencias de esta temporada:

Chin bob
Chin bobSalón Cheska

Chin Bob

El Chin Bob es un corte de base rectangular, que enmarca justo el ángulo de la mandíbula llegando a la barbilla, de ahí su nombre. Este largo está muy de moda y es perfecto para rostros angulosos y alargados, porque aporta un volumen lateral que los proporciona. También lo podemos adaptar a rostros redondeados, en los que incorporamos algunas capas superiores para darle volumen y al mismo tiempo estilizar el rostro. Es un corte que funciona muy bien en melenas lisas, y también en onduladas suaves. En la versión de Cheska para esta primavera lo hacen bastante lineal, “blunt”, sin capas, por eso también es llamado blunt bob. Es un largo que resulta muy sexy, ideal para lucir cuello y escote en verano, y que permite peinarlo de muchas formas diferentes: da muchísimo juego. Puedes dejarlo liso, o llevarlo bastante texturizado, nada perfecto, dejando las puntas en movimiento, libres o, incluso, despuntadas.

Butterfly cut
Butterfly cutSalón Cheska

Butterfly Cut en rubio vanilla butter

En esta colección han incorporado dos nuevas versiones del Butterfly cut, con volumen en la parte de arriba, y un rubio muy especial que arrasa en las tendencias y entre nuestras clientas. Estas melenas, en un rubio beige ligeramente avainillado o con matices mantequilla, un degradé que hacemos con la raíz fundida y para conseguir estos tonos tan luminosos, muy apetecibles de cara al verano, que van fenomenal tanto a mujeres con la piel clara como con una base más oscura. Lo trabajamos con babylights y balayage, y se trata de uno de los tonos más deseados, sobre todo entre las clientas más jóvenes. Lo hacen con una técnica de raíz fundida con el color de pelo propio para que no sea tan comprometido y dure más, y realizan también un poco de contouring en la zona de la cara para enmarcar los rasgos (pómulo, boda, mandíbula). Da mucho juego, volumen, movimiento, y encaja, sobre todo, en largos entre la clavícula y el pecho, que se llevan mucho más que las melenas XL enteras.

Copper french banks
Copper french banksSalón Cheska

Copper French Bangs

Esta melena cobriza es otra de las tendencias más top de esta temporada, con flequillo y capas delanteras con una clara inspiración setentera y un aire chic francés. Se lleva muchísimo liso, y también con esta onda tan romántica y vaporosa que se han visto mucho en las principales pasarelas de esta temporada. Los cobrizos, en su versión más “glossy”, se llevan muchísimo, y para darle un poco de movimiento, gracia y textura, incorporamos nuestras capas invisibles y un desfilado delantero que acompaña al flequillo abierto, que da un aire más romántico y renovado.

En cuanto al color, en 2024 los colores oscuros han vuelto con fuerza, y en Cheska apuestan por ellos en sus versiones más glossy y brillantes, porque vienen pisando fuerte, con permiso de los rubios y cobrizos más clásicos de esta temporada de primavera verano.

French bob
French bobSalón Cheska

Micro French Bob

Una versión súper cortita, muy lineal y geométrica, del icónico Bob, un clásico renovado que estiliza el cuello y armoniza las facciones, de líneas muy puras. Es un corte escultura pura, específico para cabellos lisos o que lo lleven liso. En Cheska le han incorporado un baño de color en castaño expresso para darle más fuerza. Enmarca el pómulo y marca una línea hacia la boca, que realza muchísimo los rasgos.

Curly Carré
Curly CarréSalón Cheska

Baby bangs en un Curly Carré

En este corte, específico para cabello rizado y con una forma cuadrangular, el protagonista absoluto es el microflequillo despuntado que es tendencia total este verano. Es cierto que este tipo de baby bangs no es apto para todos los rostros, pero cuando enmarca las facciones queda súper bonito. Combinado con la patilla marcada, dibuja el rostro con mucha personalidad y mucha fuerza.

Curly shag
Curly shagSalón Cheska

Curly Shag

Una versión un poco más larga del shaggy en un cabello rizado, con capas que funcionan maravillosamente para compensar los volúmenes, descargarlo y conseguir un corte más sexy con rizos hacia la cara que acompañan a las mejillas y abren la mirada. Con el corte a capas se evita que el cabello se vea ‘masa’, y logramos que tenga más cuerpo, respetando la textura y potenciando la forma del rizo para que sea protagonista total. No hay que tener miedo al cambio en los cabellos rizados, solo hay que dar con el volumen perfecto para tu rizo. En Cheska son expertos en corte de cabello rizado, tanto en mojado como en seco.

Pixie
PixieSalón Cheska

Pixie

En 2024 no puede faltar su versión del pixie con gran patilla y un flequillo lleno de personalidad, peinado a hebras, con la patilla y la nuca con un poco de efecto mullet. “El pelo corto se lleva muchísimo, nosotros apostamos por la versión pixie, que es quizá la más femenina de todas”, explica Baras. “Le hemos añadido unos reflejos miel para darle textura, brillo y un toque de claroscuro, de movimiento, para crear contrastes”, matiza.

Bixie
BixieSalón Cheska

Bixie

“Este corte es uno de mis favoritos de la colección”, asegura María. A medio camino entre el bob y el pixie, el rasgo estrella del look es su gran flequillo, que viene del pixie, y se ve acompañado por las largas patillas que se prolongan creando un mini bob. En lo que se refiere al color, lo obtenemos combinando rubios mantequilla y caramelo para darle más textura al pelo y potenciar un aire desordenado y gamberro.

New bob
New bobSalón Cheska

New Bob

Con este corte reinventan un clásico y presentan una nueva versión del bob muy diferente, que incorpora capas personalizadas en función de la textura del cabello. En este caso, como el cabello es fino, las capas proporcionan mucho movimiento en un corte que es muy sólido de base, y que aporta la sensación de tener más pelo y más volumen, algo que los cabellos finos siempre agradecen.

Desmontando falsos mitos...

¿Cada cuánto hay que lavar el cabello?

María Baras reconoce que hay mucho mito en torno a la eterna pregunta y resume rápido la respuesta: “cada cuanto lo necesite tu cabello”. Es decir, el pelo con tendencia grasa no se ensucia con más facilidad si lo lavas con más frecuencia ni conseguirás regular la producción de sebo por dejar tres días sin lavarlo. “Si lo tienes graso y lo necesitas, es bueno lavarse el pelo todos los días. Lo que es malo es dejarlo sucio porque incluso lo puedes obstruir más con la propia grasa”. Al final, esto depende de un tema hormonal, de la alimentación que lleves... Pero el pelo, asegura, se puede lavar sin miedo hasta dos veces al día si así lo requiere. Lo importante, eso sí recalca la experta, es que sea con un champú de buena calidad y adecuado a tu tipo de pelo.

¿Son efectivas las mascarillas caseras?

Aunque siempre es mejor aceite capilar, el aceite de oliva, de argán de coco... pueden servir para hidratar. "Han sido cosméticos que se han utilizado a lo largo de la historia desde tiempos inmemorables... Yo siempre digo: ¡prueba! y si te va bien, ¡genial!", explica Baras. El problema, confiesa entre risas, es que a veces se queda el pelo tan pringoso que no hay quien lave eso. "No están diseñados para el pelo que hay gente que habla maravillas porque tiene el pelo sequísimo y le ha venido super bien porque claro que el aceite hidrata y hay mucha gente que prefiere las cosas naturales. "El huevo es proteína pura, el aguacate tiene aceites buenísimos... pero yo creo más en estos alimentos para comerlos que para aplicarlos en el cabello", confiesa.