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Cómo quitar el moho negro de la silicona de la cocina
En resumen, el moho negro en la silicona se combate con una limpieza dirigida, buena ventilación y, si hace falta, con un sellado nuevo y sanitario

Con la humedad y las salpicaduras constantes, las juntas de silicona del fregadero y la encimera son terreno fértil para el moho negro. Más allá del impacto estético, su presencia puede agravar alergias y malos olores. La buena noticia: con limpieza dirigida, ventilación y, si hace falta, sustitución de la junta, es posible erradicarlo y prevenir su reaparición.
Qué necesitas y cómo actuar paso a paso
1. Protección y ventilación. Abre ventanas, usa guantes y, si es posible, mascarilla
2. Limpieza inicial. Lava la zona con agua tibia y lavavajillas para retirar grasa. Seca bien.
3. Tratamiento antimohos (elige una opción):
- Lejía diluida (hipoclorito). Mezcla 1 parte de lejía por 3–4 de agua. Empapa papel o algodón, colócalo sobre la junta y deja actuar 15–30 min. Retira y aclara.
- Peróxido de hidrógeno (agua oxigenada 3%). Pulveriza y deja 15–30 min. Frota con cepillo de cerdas suaves y aclara.
- Vinagre blanco (si prefieres algo suave). Pulveriza, espera 30–60 min y frota. Útil para moho superficial, menos eficaz en colonias profundas.
4. Cepillado focalizado. Usa un cepillo de dientes viejo o un cepillo para juntas. Evita rayar la encimera.
5. Aclarado y secado. Enjuaga con agua y seca con papel o un paño de microfibra. La humedad residual favorece el rebrote.
Cuando el moho “volvió a la raíz”
Si las manchas persisten o la silicona está cuarteada, toca retirar y rehacer la junta:
- Corte limpio. Con un cutter a ras, levanta la silicona vieja.
- Eliminador de silicona (opcional). Ayuda a ablandar restos.
- Desinfección de base. Antes de sellar, limpia el canal con peróxido o lejía diluida y deja secar por completo.
- Nueva aplicación. Usa silicona antimoho o “sanitaria”. Alisa con espátula y deja curar el tiempo indicado por el fabricante antes de mojar.
Trucos para que no vuelva
- Ventila: usa extractor al cocinar y deja el área seca tras fregar.
- Seca las juntas después de grandes salpicaduras.
- Revisa fugas en grifos y sellos del fregadero.
- Desinfecta ligero cada 1–2 semanas con vinagre o peróxido para mantenimiento.
- Evita la mezcla de químicos (nunca combines lejía con vinagre o amoniaco).
Señales de alarma
- Manchas que se expanden rápidamente o mal olor persistente.
- Personas con asma o alergias que empeoran en la cocina.
- Silicona desprendida o gomosa: indica que la sustitución es ya necesaria.
En resumen, el moho negro en la silicona se combate con una limpieza dirigida, buena ventilación y, si hace falta, con un sellado nuevo y sanitario. Con rutinas sencillas de secado y desinfección puntual, la cocina puede mantenerse limpia, segura y sin manchas.
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