Expedición

"La Cosa": descubren una misteriosa criatura en las profundidades del océano

Hallado a más de 3.500 metros de profundidad en aguas neozelandesas, este animal dejó perplejos a los expertos

Identifican una rara especie marina en las profundidades de las aguas neozelandesas
Identifican una rara especie marina en las profundidades de las aguas neozelandesasNIWA

Un equipo de investigadores de Nueva Zelanda ha descubierto una rara y "misteriosa" especie marina invertebrada a más de 3.500 metros de profundidad. El hallazgo fue realizado durante una expedición de tres semanas liderada por expertos del Instituto Nacional de Investigación del Agua y la Atmósfera de Nueva Zelanda (NIWA) en la fosa submarina Bounty, ubicada al este de la Isla Sur y que se extiende a lo largo de 800 kilómetros.

El extraño organismo, inicialmente bautizado por los científicos como "La Cosa", no pudo ser identificado inicialmente, pese a que en el barco viajaban varios reconocidos expertos.

Fosa Bounty
Fosa BountyA. CruzLa Razón

"Parecía una estrella de mar, pero pensamos que también podría ser una anémona de mar o un octocoral", explicó Sadie Mills, bióloga marina del NIWA y jefa de la expedición, en un comunicado de la entidad científica enviado este jueves a EFE . Las primeras pruebas de ADN no arrojaron similitudes claras con ningún organismo previamente conocido.

Entre las formas de vida recolectadas en la aventura a 3.500 metros de profundidad, el espécimen desconcertó a los expertos de Niwa.
Entre las formas de vida recolectadas en la aventura a 3.500 metros de profundidad, el espécimen desconcertó a los expertos de Niwa.NIWA

Sin embargo, estudios genéticos posteriores revelaron una coincidencia del 98,9 % con una ascidia abisal o ascua marina denominada Oligotrema lyra. Esta identificación fue confirmada por Mike Page, un experto en taxonomía del NIWA.

Aunque la especie Oligotrema lyra ya era conocida por la ciencia, esta es la primera vez que se documenta su presencia en aguas de Nueva Zelanda. “Es sorprendente que la genética nos haya ayudado a resolver el misterio. En realidad teníamos dos especímenes, pero resultó que ambos eran solo partes de la criatura completa, lo que nos desconcertó porque no estábamos viendo el cuadro completo”, dijo Sadie.

Las ascidias, que pueden contraer sus sifones y expulsar agua cuando son perturbadas, son comunes en las aguas costeras y en las profundidades de la plataforma continental de este país oceánico. Este hallazgo forma parte de un proyecto global impulsado por la Fundación Nippon y la fundación británica de exploración oceánica Nekton, que busca acelerar el descubrimiento y protección de la biodiversidad marina, en el marco del Programa del Decenio Oceánico de las Naciones Unidas.