Crece la percepción de desigualdad en España y la mayoría teme que irá a más

Casi el 53 % de los españoles cree que actualmente hay más desigualdad social que hace diez años, frente al 33 % que percibe un país más igualitario. Además, más de la mitad (55 %) piensa que la situación empeorará en la próxima década, según revela el Estudio sobre desigualdades sociales publicado este jueves por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

El informe refleja que la percepción generalizada es que en España “existen desigualdades en unos aspectos, pero no en otros” (46,7 %), aunque un 40,9 % considera que hay grandes desigualdades, cifra que se dispara al 84 % cuando se amplía el foco al ámbito mundial.

Entre los desequilibrios más señalados, destacan las diferencias entre ricos y pobres (7,99 puntos sobre 10), seguidas de las que se dan entre directivos y trabajadores (7,68), inmigrantes y población nacida en España (7,08), habitantes del campo y la ciudad (6,85), personas desempleadas y con empleo (6,71), jóvenes y adultos (6,61), y, por último, entre hombres y mujeres (6,25).

Esta situación preocupa profundamente a la ciudadanía: un 87,5 % se declara muy o bastante preocupado, y el 83,1 % cree que la acumulación de riqueza en pocas manos va en aumento. Por ello, casi el 90 % opina que los gobiernos deben intervenir para evitar que crezcan las desigualdades sociales y económicas.

Sobre el papel del sistema democrático en esta cuestión, las opiniones están divididas: un 49,2 % cree que favorece un reparto equitativo de la riqueza, mientras que un 39,9 % piensa que más bien lo perjudica.

En cuanto a las comunidades autónomas, la percepción mayoritaria (44,8 %) es que las desigualdades regionales tenderán a aumentar, frente al 41 % que cree que se mantendrán estables.

Pese a todo, el 66,5 % de los encuestados se declara muy o bastante satisfecho con su nivel de vida actual, frente a un 30 % que se siente poco o nada conforme. Por último, algo más de la mitad afirma haber tenido más oportunidades económicas que sus padres, mientras que el 40 % afirma lo contrario.